La crisis España y la CEE
Hay muy pocas posibilidades de que el Parlamento italiano pueda ratificar los pactos para la entrada de España en el Mercado Común si se prolonga la crisis de Gobierno, y mucho más si dicha crisis acaba desembocando en una disolución de las cámaras para convocar nuevas elecciones.El embajador de España, Jorge de Esteban, se reunió ayer con el republicano Giorgio la Malfa, presidente de la Comisión de Asuntos Exteriores de la Cámara baja, y el lunes tendrá otro encuentro con el presidente del Senado, el democristiano Amintore Fanfani.
El problema consiste en que, aunque, según la Constit...
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Hay muy pocas posibilidades de que el Parlamento italiano pueda ratificar los pactos para la entrada de España en el Mercado Común si se prolonga la crisis de Gobierno, y mucho más si dicha crisis acaba desembocando en una disolución de las cámaras para convocar nuevas elecciones.El embajador de España, Jorge de Esteban, se reunió ayer con el republicano Giorgio la Malfa, presidente de la Comisión de Asuntos Exteriores de la Cámara baja, y el lunes tendrá otro encuentro con el presidente del Senado, el democristiano Amintore Fanfani.
El problema consiste en que, aunque, según la Constitución, las cámaras mantienen la plenitud de sus poderes durante la crisis de Gobierno, en la práctica, el Parlamento se paraliza. En este caso, el único recurso sería poder acogerse al texto de la Constitución y plantear el problema como un caso de emergencia. Es una cuestión que tendrá que plantearse a alto nivel. En la práctica, debe ser el mismo presidente de la República quien solicite a los presidentes de la Cámara y del S nado que convoquen una sesión extraordinaria y de emergencia. Pero esta solución no es fácil, ya que dicha convocatoria tendría que hacerse con carta personal a domicilio a senadores y diputados, los cuales, durante la crisis de Gobierno, y más en caso de nuevas elecciones, quedan absorbidos por los problemas de sus respectivos partidos.
De ahí que la Embajada española se haya puesto ya en marcha para plantear el asunto en caso de que la crisis se alargue.
Por ahora, el tratado ha sido aprobado el pasado día 16 por unanimidad en la Comisión de Asuntos Exteriores del Senado, y el 24 tenía que haber pasado a la votación del pleno. De allí debía pasar a la misma comisión de la Cámara baja y después otra vez a la sesión plenaria.