Optimismo económico en el Mercado Común para 1985 y 1986
La actividad económica de la CEE a diez debería seguir creciendo, moderadamente en 1985 y 1986. En volumen, el producto- interior bruto (PIB) aumentará en un 2,3% en 1985 y en un 2,5% al año siguiente, según las últimas y ligeramente optimistas previsiones de los servicios de la Comisión Europea.De acuerdo con las mismas estimaciones, la inflación se frenará de modo notable, para pasar de un 6,2% en 1984 a un 5,2% este año, para quedar cifrada en el 3,9% en 1986. La expansion del empleo se acelerará, lo que debería ser suficiente para frenar el aumento del paro (10,9%. en 1984, 11,2% en...
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La actividad económica de la CEE a diez debería seguir creciendo, moderadamente en 1985 y 1986. En volumen, el producto- interior bruto (PIB) aumentará en un 2,3% en 1985 y en un 2,5% al año siguiente, según las últimas y ligeramente optimistas previsiones de los servicios de la Comisión Europea.De acuerdo con las mismas estimaciones, la inflación se frenará de modo notable, para pasar de un 6,2% en 1984 a un 5,2% este año, para quedar cifrada en el 3,9% en 1986. La expansion del empleo se acelerará, lo que debería ser suficiente para frenar el aumento del paro (10,9%. en 1984, 11,2% en 1985 y 11,1 % en 1986).
El crecimiento de la producción no se verá favorecido por las exportaciones, ya que se ha previsto que el nivel del mercado mundial retrocederá en los próximos años, sino por un refuerzo gradual de la demanda interna. No obstante, el superávit de la balanza por cuenta corriente de la Comunidad Económica Europea debería crecer en un 0,5% del producto interior bruto en 1985 y en un 0,6% en 1986.
En 1986, los países con mayor crecimiento deberían ser la República Federal Alemana (3,5% del PIB), Dinamarca (3,2%) e Italia (2,7%).
El crecimiento del Reino Unido, marcado en 1985 (3,4%), se frenará (2%) en 1986. El crecimiento de la CEE será, en porcentaje, similar al de Estados Unidos, pero muy inferior al de Japón (5% en 1985 y 4,2% en 1986).
Los servicios de la comisión preven que las necesidades de endeudamiento de los diferentes Gobiernos de la Comunidad se contraerán a un 5,2% del producto interior bruto en 1985 y a un 4,8% en el año 1986.