CATALUÑA

La oposición de los vecinos impide en Barcelona abrir dos pisos para maltratadas

BarcelonaDos pisos para acoger en Barcelona a mujeres maltratadas, cuyas inauguraciones estaban previstas para el pasado mes de octubre, no han podido abrirse debido a la oposición de los vecinos del barrio en donde iban a ser ubicados. El Ayuntamiento sigue intentando poner los pisos refugio en funcionamiento, pero los barrios en donde se situarán no serán dados a conocer "para evitar problemas con los maridos o compañeros de las mujeres acogidas". La falta de presupuesto del Ayuntamiento de Barcelona ha retrasado también la apertura.

El Ayuntamiento de Barcelona anunció, para e...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

BarcelonaDos pisos para acoger en Barcelona a mujeres maltratadas, cuyas inauguraciones estaban previstas para el pasado mes de octubre, no han podido abrirse debido a la oposición de los vecinos del barrio en donde iban a ser ubicados. El Ayuntamiento sigue intentando poner los pisos refugio en funcionamiento, pero los barrios en donde se situarán no serán dados a conocer "para evitar problemas con los maridos o compañeros de las mujeres acogidas". La falta de presupuesto del Ayuntamiento de Barcelona ha retrasado también la apertura.

El Ayuntamiento de Barcelona anunció, para el mes de octubre, la apertura de dos pisos para acoger a las mujeres maltratadas por sus maridos o compañeros que desearan abandonar el domicilio conyugal. Los dos pisos, que tenían capacidad para unas 25 personas, incluidos los hijos de las mujeres refugiadas, habían sido utilizados anteriormente como centro abierto para jóvenes.

"Sin embargo", afirma Enrica Mata, responsable en el Ayuntamiento del ámbito de la mujer, "los vecinos, que ya se habían mostrado contrarios a que vivieran allí los jóvenes, se han opuesto a que sean utilizados como refugios de mujeres maltratadas, por lo que se ha retrasado su apertura". La oposición de los vecinos dificulta su inauguración, ya que la característica más importante de estos centros es que sean anónimos para impedir que las mujeres acogidas puedan ser localizadas por sus maridos y cualquier protesta ciudadana revelaría su presencia.

El centro, en colaboración con el Ayuntamiento de Barcelona, ha puesto en marcha un programa de trabajo que facilitaría la apertura de los pisos de acogida de mujeres "para finales de año".

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Archivado En