Tres ciudadanos franceses, entre ellos una mujer, secuestrados en Beirut

BeirutTres ciudadanos franceses -un diplomático y dos empleados administrativos- fueron secuestrados ayer en el sector musulmán y occidental de Beirut, según señaló la embajada de Francia y reivindicó posteriormente la misteriosa organización terrorista Jihad Islámica.

Marcel Fontaine, de 45 años de edad, vicecónsul francés, fue capturado ayer por dos jóvenes armados en una librería donde solía comprar la Prensa antes de incorporarse a su trabajo en la antigua embajada gala en la calle Clemenceau.

Allí, por motivos de seguridad, sólo subsiste ahora un reducido servicio con...

BeirutTres ciudadanos franceses -un diplomático y dos empleados administrativos- fueron secuestrados ayer en el sector musulmán y occidental de Beirut, según señaló la embajada de Francia y reivindicó posteriormente la misteriosa organización terrorista Jihad Islámica.

Marcel Fontaine, de 45 años de edad, vicecónsul francés, fue capturado ayer por dos jóvenes armados en una librería donde solía comprar la Prensa antes de incorporarse a su trabajo en la antigua embajada gala en la calle Clemenceau.

Allí, por motivos de seguridad, sólo subsiste ahora un reducido servicio consular y otro cultural dependientes de la embajada.

Fontaine está casado y desarrolla sus actividades diplomáticas en la capital libanesa desde el 16 de febrero de 1983.

Dos hombres provistos de revólveres entraron en la papelería y obligaron al vicecónsul a subir en un coche BMW de color verde, a bordo del cual esperaba una tercera persona.

El diplomático no ofreció resistencia alguna. Ningún testigo pudo intervenir, según refirió el vendedor del puesto de periódicos de la papelería en la cual se desarrollaron los hechos.

El grueso de la representación diplomáticas ha sido trasladado a la zona cristiana de la ciudad.

Dos empleados de estos servicios, Marcel Carton, de 62 años, encargado de los asuntos de protocolo, y su hija Danielle Pérez, secretaria en el servicio cultural, de 34 años, también desaparecieron misteriosamente, aunque ningún testigo pudo describir las circunstancias de su secuestro. Padre e hija no habían llegado aún a sus despachos situados en la calle Clemenceau

Precedente

Jihad Islámica asumió en dos llamadas telefónicas a delegaciones beirutíes de agencias internacionales de prensa la responsabilidad de la triple acción terrorista, -entre cuyas víctimas figura por primera vez una mujer, lo cual marca un cambio en la composición de este tipo de atentado-.La organizacion islámica acusaba al vicecónsul de haber proporcionado informaciones a Estados Unidos e Israel sobre la localización de una sede del Partido de Dios (hezbollahi, confesional shií) en el popular barrio beirutí de Bir el Abad, donde la explosión de un coche bomba causó aprincipios de mes la muerte de más de 70 personas.

Otro interlocutor anónimo, que aseguró hablar en nombre de la misma organización, Comando Beirut, afirmó que los rehenes serían liberados cuando el Gobierno de París ponga término a su ayuda a Irak en la guerra contra Irán y anule el proyecto de venta de aviones cazabombarderos Mirage 2.000 a Arabía Saudí.

"Nuestras operaciones contra el imperialismo aumentarán progresivamente a partir de ahora. Somos los más fuertes", agregó el interlocutor anónimo que estableció el contacto telefónico.

En total, siete extranjeros, -tres franceses, dos británicos un holandés y un norteamericano-, han sido secuestrados en Líbano en la última semana, a los que hay que añadir otros cuatro ciudadanos estadounidenses, detenidos también por la organización Jihad Islámica desde hace varios meses.

Los secuestros de Gordon Nash y Brian Levick, de nacionalidad británica, y el periodista norteamericano Terry Anderson, habían sido reivindicados por la organización clandestina islámica.