12 muertos en un atentado perpetrado contra un local de los shiíes en el sur de Líbano

Doce personas, entre ellas un jefe de la milicia del movimiento shií Amal (guerrilla antiisraelí), Mohamed Saad, resultaron muertas y otras 25 heridas a consecuencia del atentado perpetrado ayer en la husseinyeh (centro de reunión de los musulmanes shiíes) de Maarakeh, localidad situada al este de Tiro, en el sur de Líbano.Entre la víctimas mortales figura también el dirigente de Amal en la mencionada localidad, Jalil Jiradi. Saad y Jiradi estaban encargados de coordinar los ataques contra las fuerzas israelíes por parte de los comandos shiíes en las localidades situadas al este de Tiro...

Doce personas, entre ellas un jefe de la milicia del movimiento shií Amal (guerrilla antiisraelí), Mohamed Saad, resultaron muertas y otras 25 heridas a consecuencia del atentado perpetrado ayer en la husseinyeh (centro de reunión de los musulmanes shiíes) de Maarakeh, localidad situada al este de Tiro, en el sur de Líbano.Entre la víctimas mortales figura también el dirigente de Amal en la mencionada localidad, Jalil Jiradi. Saad y Jiradi estaban encargados de coordinar los ataques contra las fuerzas israelíes por parte de los comandos shiíes en las localidades situadas al este de Tiro.

La explosión fue provocada por una bomba escondida en el último piso o en el tejado del inmueble, en el que se encontraban unas 200 personas.

El movimiento shií Amal había desencadenado una dura campaña de resistencia contra las tropas de ocupación israelíes en el sur de Líbano. Como respuesta, las fuerzas de Tel Aviv efectuaron operaciones de represalia en más de una docena de localidades de la zona.

La más importante de esas acciones de represalia fue lanzada precisamente contra la localidad de Maarakeh, situada a 12 kilómetros de Tiro, durante el pasado sábado. Las fuerzas israelíes la abandonaron el domingo después de haber dinamitado tres casas e interrogado a todos los varones de la aldea.

Miembros de la Cruz Roja libanesa fueron recibidos a tiros por los soldados isrelíes cuando se disponían a entrar en la localidad para socorrer a los heridos.