Cartas al director

'Gott mit uns'

Que conste que doy entero crédito al artículo del señor G. Basterra publicado en EL PAIS del 6 de febrero de 1985, página 2, aunque me cueste muchísimo creerlo.Recuerdo el Gott mit uns (Dios con nosotros) que, por orden de Hitler, llevaban todos y cada uno de los soldados del III Reich, y también por mor de esa elección divina interpretada por Hitler, la raza aria era la futura regidora de los destinos de la Tierra. Aquello costó al planeta muchos millones de muertos y de sufrimientos.

En la actualidad, Jomeini, que se considera la voz de Alá, lleva la guerra santa con cie...

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Que conste que doy entero crédito al artículo del señor G. Basterra publicado en EL PAIS del 6 de febrero de 1985, página 2, aunque me cueste muchísimo creerlo.Recuerdo el Gott mit uns (Dios con nosotros) que, por orden de Hitler, llevaban todos y cada uno de los soldados del III Reich, y también por mor de esa elección divina interpretada por Hitler, la raza aria era la futura regidora de los destinos de la Tierra. Aquello costó al planeta muchos millones de muertos y de sufrimientos.

En la actualidad, Jomeini, que se considera la voz de Alá, lleva la guerra santa con cientos de miles de muertos, que no pueden emular los de Hitler por razones de potencia militar, geografía e intereses locales.

Pero hete aquí que Reagan tiene teléfono directo con el Espíritu Santo, lo interpreta, cual Mahoma redivivo, y esgrimiendo las escrituras afirma que están del lado EE UU. Además, afirma que a Estados Unidos lo bendijo el Señor Jehová, por encima de todo el orbe y sobre todos los pueblos.

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Los que creen tener teléfono directo con el Espíritu Santo suelen acabar rompiendo el teléfono y afirmando que "el Espíritu Santo son ellos".

Creo, serenamente, que el Gobierno español y los políticos de nuestro país deben pensarlo dos veces antes de liar a España con la OTAN. Porque una vez dentro, y como dijo un alto dirigente estadounidense, "es más difícil salir de la OTAN que del infierno". Ahí tenemos el caso de Nueva Zelanda, sobre la que han pedido represalias divinas los dirigentes de EE UU.

Que algún jefecillo del Gobierno se permita posturas de pastorcitas de Leiría, pase. Es ridículo. Pero que lo haga el jefe de la más poderosa nación occidental es patéticamente trágico.

Que Buda, Alá, Jehová y todos los dioses del planeta nos cojan confesados.-

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