Los niños gitanos ingresarán en el colegio Severo Ochoa, afirma Educacion y Ciencia

Gonzalo Junoy, director provincia¡ del Ministerio de Educación y Ciencia (MEC), declaró ayer que los 35 niños gitanos cuyo acceso al colegio público Severo Ochoa, de Vicálvaro, fue rechazado por los padres de los alumnos del centro, ingresarán en ese colegio cuando se reanude el curso escolar. "La Administración", dijo Junoy, "no tiene otra alternativa que hacer cumplir los mandatos constitucionales, con independencia de los criterios personales que puedan sostener los padres de alumnos".

Esos mandatos, según Junoy, son los que establecen que "todos los ciudadanos son iguales ante la le...

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Gonzalo Junoy, director provincia¡ del Ministerio de Educación y Ciencia (MEC), declaró ayer que los 35 niños gitanos cuyo acceso al colegio público Severo Ochoa, de Vicálvaro, fue rechazado por los padres de los alumnos del centro, ingresarán en ese colegio cuando se reanude el curso escolar. "La Administración", dijo Junoy, "no tiene otra alternativa que hacer cumplir los mandatos constitucionales, con independencia de los criterios personales que puedan sostener los padres de alumnos".

Esos mandatos, según Junoy, son los que establecen que "todos los ciudadanos son iguales ante la ley y todos tienen derecho a la educación". El director provincial del MEC en Madrid afirmó que espera el informe del inspector de zona de su departamento sobre el asunto, al parecer contrario a la integración de los niños en el centro, y añadió que también tiene pendiente una conversación con la presidenta de la Junta Municipal del Distrito de Moratalaz, la concejala socialista Concepción Aparicio que declaró su conformidad con que los 35 niños gitanos no ingresen en el colegio público Severo Ochoa (ver EL PAIS del 27 de diciembre). La concejala argumentó que "los ánimos están muy encrespados y existe el peligro de que los pequeños sean agredidos".Para Junoy, sin embargo, los representantes de la Administración no pueden sostener esa posición. "Tenemos que hacer cumplir la ley y los chavales tienen que entrar en ese colegio público porque tienen todo el derecho a ello". El delegado ministerial añadió que la posible solución es que los 35 alumnos gitanos se integren en una o dos aulas especiales, "pero no por razones de discriminación racial, sino en base a criterios pedagógicos: tienen problemas educativos distintos a los del resto de los alumnos".

Por otra parte, dos miembros del Consejo de Dirección del colegio Severo Ochoa especificaron ayer que este órgano, formado por el director, la concejala Aparicio, cuatro profesores, cuatro padres y un representante del personal no docente, "no ha rechazado la cesión de un aula para los niños gitanos, porque no tiene atribuciones para ello". Según manifestaron, "el Consejo de Dirección se ha limitado a informar a la dirección provincial de que una masiva asamblea de padres decidió no admitir la presencia de esos niños gitanos en el colegio, amenazando con retirar a sus hijos del centro si entraban los gitanos".

Un portavoz de la organización Presencia Gitana ha señalado, por su parte, que "la situación en Vicálvaro-San Blas está podrida desde hace dos o tres años". El portavoz de la asociación gitana recordó que "este verano las autoridades municipales convirtieron en un campo de concentración vigilado policialmente el asentamiento chabolista gitano de Vicálvaro".

"Racismo endémico"

El representante gitano dijo que "es intolerable, por manifestación de racismo endémico, negar el uso de un local público a ciudadanos de pleno derecho, máxime cuando en ese colegio hay siete unidades vacías". La posición de Concepción Aparicio fue calificada del siguiente modo: "La concejala se pliega al energumenismo discriminatorio de un grupo de ciudadanos, empeñados en condenar a los niños gitanos a repetir la mala vida de sus padres".Para Presencia Gitana, la actitud de los padres que se niegan a la integración de los escolares gitanos puede constituir delito en un país cuya Constitución establece que nadie puede ser discriminado por su raza. "No entendemos porqué en este tema no actúa de oficio el fiscal jefe de la Audiencia de Madrid", dijo el portavoz.

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