Renfe e Iberia refuerzan sus servicios y ofrecen más plazas

Los habitantes del área metropolitaa de Madrid no limitan al automovil los medios de transporte para abandonar su lugar habitual de residencia en las vísperas de agosto. La tendencia creciente a huir de las carreteras obliga a Renfe a reforzar sus servicios en verano, este año concretamente entre el 22 de junio y el 25 de septiembre. La compañía ferroviaria pone a disposición de los viajeros un número mayor de plazas sobre la capacidad habitual de los trenes. Para la temporada 1984 el número de plazas extra desde Madrid se eleva a más de 1.600.000, lo que representa un 38% de aumento respecto ...

Los habitantes del área metropolitaa de Madrid no limitan al automovil los medios de transporte para abandonar su lugar habitual de residencia en las vísperas de agosto. La tendencia creciente a huir de las carreteras obliga a Renfe a reforzar sus servicios en verano, este año concretamente entre el 22 de junio y el 25 de septiembre. La compañía ferroviaria pone a disposición de los viajeros un número mayor de plazas sobre la capacidad habitual de los trenes. Para la temporada 1984 el número de plazas extra desde Madrid se eleva a más de 1.600.000, lo que representa un 38% de aumento respecto a 1983. Las líneas más reforzadas son las de Andalucía, Levante y la Costa Brava.Los días 30, 31 de julio y 1 de agosto se calcula que saldrán de Madrid en tren más de medio millón de madrileños. Un sistema que tiene fuerte demanda en verano para viajes largos es el billete de transporte combinado para viajeros con automóvil.

También la compañía de aviación Iberia aumenta sustancialmente el número de vuelos, principalmente los que se dirigen a las islas Canarias y Baleares y a las zonas del sur y levante español. Este año se ha incrementado en un 25% el número de plazas respecto a los otros meses.

Pese a la crisis económica, las agencias de viajes de Madrid afirman que en lo que va de temporada se observa un volumen de ventas más elevado que el año pasado, aunque los compradores han elegido por lo general programas de vacaciones más económicos que los que fueron frecuentes en 1983 y los viajes largos al extranjero han decaido.