Cerrado el crédito 'jumbo' del INI tras una advertencia sobre los efectos en el reparto del negocio bancario

El Instituto Nacional de Industria (INI) consiguió ayer convencer a casi toda la gran banca nacional española para participar en el crédito jumbo (de gran magnitud) de 35.000 millones de pesetas que estaba negociando en el mercado interior, después de 24 horas de tensión en las que se cruzaron veladas advertencias sobre la posibilidad de reducción del negocio bancario del sector público con aquellas entidades que no entraran en la operación. El crédito, finalmente, se cerró con pleno éxito a última hora de la mañana de ayer, con la participación de 14 bancos, incluidos cuatro extranjeros, el P...

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El Instituto Nacional de Industria (INI) consiguió ayer convencer a casi toda la gran banca nacional española para participar en el crédito jumbo (de gran magnitud) de 35.000 millones de pesetas que estaba negociando en el mercado interior, después de 24 horas de tensión en las que se cruzaron veladas advertencias sobre la posibilidad de reducción del negocio bancario del sector público con aquellas entidades que no entraran en la operación. El crédito, finalmente, se cerró con pleno éxito a última hora de la mañana de ayer, con la participación de 14 bancos, incluidos cuatro extranjeros, el Popular y el Central, pero sin la presencia del Santander.

Las duras negociaciones entabladas a lo largo de la semana para cerrar la operación anual de INI tuvieron su punto álgido entre el jueves y el viernes, cuando las conversaciones sobrepasaron el ámbito de los directores financieros y pasaron a ser tema de ocupación prioritaria de los presidentes de las entidades involucradas. Una velada advertencia de que la no participación en el crédito tendría efecto inmediato en el volumen de negocio bancario del holding público con las entidades que quedaran al margen del mismo, sirvió para desbloquear la situación y convencer a los más reticentes, según informaron fuentes solventes bancarias.El volumen de negocio, en tesorería, papel comercial y circulante, del grupo INI con alguno de los bancos participantes ronda los 300.000 millones de pesetas, dentro de una facturación anual del holding que supera el billón y medio de pesetas. La pública reticencia de algunas entidades a no participar fue interpretada en algunas instancias gubernamentales como una protesta de estas entidades por las recientes medidas del Gobierno que afectan a la banca, tales como el secreto bancario, la elevación de los coeficientes de inversión obligatoria o la adjudicción de los bancos de Rumasa.

La operación Jumbo que cada año negocia el INI en el mercado interior se distribuye por turno entre cada uno de los siete grandes bancos españoles, más el Exterior. Este año, la agencia de la operación correspondió al Banco de Bilbao, actuando los demás participantes como jefes de fila. En años anteriores inmediatos, los agentes fueron el Exterior, el Hispano y el Banesto.

Retrasos previos

Tradicionalmente, la operación ha estado sometida a fuertes tensiones debido a la estrechez de los márgenes, en algunos casos, y a la resistencia de alguno de los grandes por aceptar un compromiso que consideraba impuesto por la naturaleza del prestatario.El año pasado, cuando actuó el Banesto como agente, se produjo un considerable retraso en la culminación de la operación. Finalmente, la operación se saldó con cierto éxito, aunque sin la participación del Central. Es significativo que, año tras año, alguno de los grandes bancos, por distintas razones, se ha quedado al margen de la operación INI. Este año ha sucedido con el Santander, banco que tampoco participó en la primera edición del crédito, cuando consideró que la experiencia de operaciones sindicadas no le convenía a la entidad, pese a que posteriormente las abrazó con entusiasmo.

En el presente año, la cantidad que cada jefe de fila aportará en el crédito es de 2.500 millones de pesetas. Las condiciones de crédito finalmente pactadas son distintas para los dos tramos en que se dividirá el préstamo, presumiblemente en un reparto del 40/ 60. El primer tramo llevará un margen del 0,75 por encima del interbancario madrileño (mibor) o el resto irá referido directamente al preferencial. El plazo de amortización será de siete años, con cuatro de carencia.

A lo largo de esta semana se han realizado intensas gestiones ante el presidente del Banco Central, Alfonso Escámez, para convencerle de la necesidad de entrar en la operación. Según fuentes bancarias, el presidente del Bilbao, Sánchez Asiaín, llamó directamente a Escámez para convencerle de que entrara, y en un esfuerzo posterior algunas posiciones completamente reticentes se flexibilizaron, aunque sin llegar a un acuerdo definitivo hasta última hora.

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