TRIBUNALES

Visto para sentencia el juicio de extradición del lugarteniente del mafioso Antonio Bardellino

El juicio de extradición contra Raffaele Scarnato se celebró ayer en la Audiencia Nacional. Scarnato es el lugarteniente del jefe de la Camorra napolitana Antonio Bardellino, Tonino, cuya puesta en libertad en extrañas circunstancias originó la apertura de un procedimiento contra los jueces Ricardo Varón Cotos y Jaime Rodríguez Hermida, ambos suspendidos provisionalmente.

Tras la detención de Bardellino y Scarnato el 3 de noviembre de 1983 en Barcelona, las autoridades italianas solicitaron la extradición de ambos por diversos delitos presuntamente cometidos en aquel país. Los dos camor...

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El juicio de extradición contra Raffaele Scarnato se celebró ayer en la Audiencia Nacional. Scarnato es el lugarteniente del jefe de la Camorra napolitana Antonio Bardellino, Tonino, cuya puesta en libertad en extrañas circunstancias originó la apertura de un procedimiento contra los jueces Ricardo Varón Cotos y Jaime Rodríguez Hermida, ambos suspendidos provisionalmente.

Tras la detención de Bardellino y Scarnato el 3 de noviembre de 1983 en Barcelona, las autoridades italianas solicitaron la extradición de ambos por diversos delitos presuntamente cometidos en aquel país. Los dos camorristas se opusieron a su traslado a Italia. Posteriormente el juez Varón, que sustituía al titular del juzgado encargado del caso, puso en libertad con fianza de cinco millones de pesetas a Bardellino, sin tener en cuenta su peligrosidad. Este juez, al parecer, había recibido presiones del magistrado Rodríguez Hermida para que pusiera en libertad al mafioso. Fuentes solventes aseguraron a este periódico qué la libertad había costado a Bardellino 15 millones de pesetas, cinco de los cuales fueron empleados para la fianza, y los buenos oficios de una mujer.En la vista, Scarnato afirmó que no tiene ninguna relación con la Camorra y que no es ni lugarteniente ni guardaespaldas de Bardellino. Reconoció que cuando fue detenido llevaba documentación falsa, y agregó que los cargos que le imputa el Gobierno italiano no tienen relación con su persona, sino que son producto del ambiente social de Nápoles.

Actuó como fiscal Luis Manuel Poyatos, cuya intervención en el caso Bardellino fue polémica a raíz de las sospechas de que su firma había sido falsificada, extrerno que fue posteriormente desmentido. Poyatos solicitó que se concediera la extradición, ya que los delitos por los que Scarnato está reclamado, asociación para delinquir y estragos, están incluidos en los convenios y tratados de extradición.

El defensor se opuso a la extradición debido a que la asociación para delinquir no es delito en España y porque la Camorra no es una organización armada. El letrado aportó una sentencia de la justicia italiana en la que se absuelve a Scarnato del principal delito por el que se le reclama, el robo de un coche y la colocación de un artefacto explosivo en su interior.

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