Libertad con corsé de hierro.
La estatua de la Libertad muestra su encorsetado traje de hierro mientras su firme mirada refleja, para el ojo irónico, una incierto brillo de escepticismo. Pero la realidad, que no entiende de simbolismos, aclara que el tinglado responde, tan sólo, a los preparativos de una fiesta, la del centenario de la estatua. Para cuando esta libertad de piedra cumpla un siglo, en 1986, la labor de médicos y maquilladores la presentará en todo su esplendor, reparados los numerosos achaques acumulados a lo largo de los años....
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La estatua de la Libertad muestra su encorsetado traje de hierro mientras su firme mirada refleja, para el ojo irónico, una incierto brillo de escepticismo. Pero la realidad, que no entiende de simbolismos, aclara que el tinglado responde, tan sólo, a los preparativos de una fiesta, la del centenario de la estatua. Para cuando esta libertad de piedra cumpla un siglo, en 1986, la labor de médicos y maquilladores la presentará en todo su esplendor, reparados los numerosos achaques acumulados a lo largo de los años.