Cartas al director

España se desertiza

Al respecto de la réplica de los técnicos forestales del 17 de marzo, contra la carta de don Luis Costa, de León, publicada el 22 de febrero, yo, aunque no soy alumno de la Escuela Universitaria de Ingeniería Técnica Forestal, sí soy un ecologista, naturalista y proteccionista que ve casi impotente cómo España se desertiza. Se sustituyen especies quercus (robles, encinas, alcornoques, etcétera) por pinos y eucaliptos, claros responsables de la erosión, del deterioro de los biotopos, de la acidez de los suelos, y en general de la ruptura del equilibrio ecológico.Esto no lo digo po...

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Al respecto de la réplica de los técnicos forestales del 17 de marzo, contra la carta de don Luis Costa, de León, publicada el 22 de febrero, yo, aunque no soy alumno de la Escuela Universitaria de Ingeniería Técnica Forestal, sí soy un ecologista, naturalista y proteccionista que ve casi impotente cómo España se desertiza. Se sustituyen especies quercus (robles, encinas, alcornoques, etcétera) por pinos y eucaliptos, claros responsables de la erosión, del deterioro de los biotopos, de la acidez de los suelos, y en general de la ruptura del equilibrio ecológico.Esto no lo digo por decir, basta salir al campo: donde había encinas, hay pinos; donde había un suelo compacto, hoy se resquebraja por la erosión; y hay muchas especies animales y vegetales que ven desaparecer su hábitat natural y algunas hasta se van extinguiendo por la regresión de sus biotopos.

Debo señalar que en los puntos tres y cuatro de la carta de los técnicos forestales, donde se refieren a que a partir de los años cuarenta la repoblación ha cubierto muchos terrenos antes despoblados, esto no me parece correcto, pues en los últimos años se han deforestado más de 2.000.000 de hectáreas de terrenos, y lo que se ha repoblado ha sido sustituyendo alcornoques, encinas, robles, etcétera, pobladores de España por excelencia, por eucaliptos y pinos, con fines de explotación maderera. También se han removido montañas enteras destruyendo en poco tiempo lo que la naturaleza ha tardado cientos de años en conseguir: un equilibrio ecológico.

Y respecto al punto cinco, es una absurda afirmación que el aprovechamiento de las masas forestales se realiza con el fin principal de "conservar, regenerar y mejorar dichas masas, quedando supeditados a estos objetivos cualquier otro tipo de actuación"; sabiendo mucha gente que el dinero se antepone a muchas otras cuestiones y que a muchos señores les gusta ver a España cubierta de pinos, por cierto mediante una repoblación que más bien parece un campo de cultivo y no un bosque, con todos los árboles a la misma altura, quizá para facilitar su tala cuando sean rentables... /

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Directivo de Adena.

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