La clinica Los Nardos, en peligro de cierre por causas económicas

La clínica privada Los Nardos, posiblemente la más conocida de Madrid, corre peligro de cerrar sus puertas, debido a problemas económicos, declaró ayer su director médico, doctor Antonio Burgueño. En estos momentos se estudia la posibilidad de reducir la plantilla en algo más de un centenar de los 330 empleaos con que cuenta, además del personal médico.Un portavoz del comité de empresa de los empleados -entre los que se cuentan auxiliares administrativos y clínicos, ATS, encargados de la limpieza, de mantenimiento, etcétera- mostró su preocupación por la falta de liquidez de la empresa, que le...

La clínica privada Los Nardos, posiblemente la más conocida de Madrid, corre peligro de cerrar sus puertas, debido a problemas económicos, declaró ayer su director médico, doctor Antonio Burgueño. En estos momentos se estudia la posibilidad de reducir la plantilla en algo más de un centenar de los 330 empleaos con que cuenta, además del personal médico.Un portavoz del comité de empresa de los empleados -entre los que se cuentan auxiliares administrativos y clínicos, ATS, encargados de la limpieza, de mantenimiento, etcétera- mostró su preocupación por la falta de liquidez de la empresa, que les ha impedido cobrar los salarios del mes de enero. Hay serias dudas de que puedan cobrar los del mes en curso.

Según el director médico, la reducción de plantilla se perfila como una salida para evitar el cierre definitivo. Los trabajadores, por su parte, se oponen también a la reducción de puestos de trabajo, aunque reconocen que la situación económica de la clínica es muy dificil. Desde el pasado lunes los trabajadores se vienen concentrando ante las puertas del edificio, entre dos y cuatro de la tarde, para pedir el cobro de sus salarios atrasados.

Fluctuaciones fuertes

El doctor Burgueño afirmó que la crisis de la clínica Los Nardos no es un caso aislado, sino que se inscribe en las dificultades económicas por las que atraviesan las clínicas privadas de todo el país, ante la incertidumbre sobre el futuro de la política de conciertos entre clínicas privadas y el Instituto Nacional de la Salud (Insalud). El Gobierno socialista parece decidido a racionalizar el sistema de conciertos, lo que supone, entre otros aspectos, no enviar enfermos de la Seguridad Social a que sean atendidos en clínicas, privadas mientras existan plazas disponibles en los hospitales públicos.Las 110 camas de la clínica Los Nardos que están concertadas con el Insalud se encuentran hoy ocupadas en su totalidad, pero según afirmó el director médico, "estamos sometidos a fluctuaciones muy fuertes. Entre el 5 de diciembre y el 20 de enero sólo asistimos a cinco o seis pacientes, lo que supone una merma importante de los ingresos por este concepto. Si la clínica se rigiera exclusivamente por motivaciones económicas, es muy posible que hubiéramos decidido el cierre hace ya tiempo".

"Por otra parte", añadió, "el Insalud debe a la clínica una cantidad cercana a los 100 millones de pesetas, en concepto de tarifas del concierto aún no abonadas".

Fuentes de la dirección provincial del Insalud en Madrid afirmaron que la elevación de tarifas se aprobó hace pocos meses, aunque con efectos retroactivos hasta 1981, lo que explica que la deuda sea importante.

"En cualquier caso", afirmó el subdirector provincial, doctor Repullo, no creo que sea una cantidad tan elevada y, si aún no se le ha pagado es porque esto lleva unos trámites administrativos complejos. Hay que revisar la facturación y las cuentas desde esa fecha, y eso lleva un tiempo. El problema de fondo es que el Insalud intenta racionalizar los gastos de la asistencia sanitaria, y los conciertos se utilizan lo menos posible. Pienso, por último, que una clínica privada debería adecuar su estructura para funcionar en base a sus enfermos privados".

La clínica Los Nardos se considera una de las mejor dotadas de Madrid, con calificación de centro sanitario médico quirúrgico. Al margen del concierto con el Insalud, la clínica atiende también a los mutualistas de varias sociedades de seguros. En 1977, cunado atravesó una crisis económica que estuvo a punto de obligar el cierre, se barajó la posibilidad de su compra por el ya desaparecido Instituto Nacional de Previsión (INP), aunque al final se optó por la firma del concierto. El director general de la clínica es Alonso Pedreira, presidente de la Asociación de Clínicas Privadas de España.