Antonio Masip

Antonio Masip, alcalde de Oviedo, hijo de otro alcalde -Valentín Masip-, militante del PSOE, fundador en 1975 de la Asociación de Amigos del Sáhara, ha levantado en armas a la Federación Española de Boxeo, que se ha querellado contra él por su prohibición de la práctica de este deporte. No quiere que los niños ovetenses vean a dos hombres pegándose bajo la advocación del deporte. Lo considera, simplemente, un problema de mala educación, y añade que el artículo 15 de la Constitución prohíbe la degradación humana. No es su única medida polémica. Ha prohibido también la venta de acebo, a propuest...

Antonio Masip, alcalde de Oviedo, hijo de otro alcalde -Valentín Masip-, militante del PSOE, fundador en 1975 de la Asociación de Amigos del Sáhara, ha levantado en armas a la Federación Española de Boxeo, que se ha querellado contra él por su prohibición de la práctica de este deporte. No quiere que los niños ovetenses vean a dos hombres pegándose bajo la advocación del deporte. Lo considera, simplemente, un problema de mala educación, y añade que el artículo 15 de la Constitución prohíbe la degradación humana. No es su única medida polémica. Ha prohibido también la venta de acebo, a propuesta de biólogos y ecologistas. Y no quiere ser conocido sólo por estas medidas, porque, además, considera que está sacando al ayuntamiento adelante, pese a los graves problemas económicos con que cuenta, provocados por el endeudamiento anterior a su gestión.

Le acusan de subirse al ring para acabar con el boxeo. Algunos de su ciudad dicen que lo único que está provocando es el resurgimiento de un deporte que agonizaba por sí solo. Pero el alcalde de Oviedo, ex consejero de Cultura y Deportes, no sólo se ha metido en esta polémica, en la que ha dicho que considera que debe prohibirse el boxeo profesional. Además de prohibir la tala y venta del acebo en el municipio ovetense, acudió a la manifestación pacifista contra la invasión de Granada, no secundada por su partido; quitó el vino español oficial el día de la Constitución y sirvió culines de sidra a los vecinos en la plaza del Ayuntamiento, e invitó al presidente de la Conferencia Episcopal Española, Díaz Merchán, a tomar, como manda la tradición, las fresas del día del Corpus, en momentos de enfrentamiento entre la Iglesia y el Estado por la procesión de Toledo, en la que el primado, Marcelo González Martín, no aceptó la presencia del ministro de Justicia.Ahora pretende, pese a los inconvenientes, rendir un homenaje de la ciudad al que fuera ministro durante la II República, Indalecio Prieto, del que es su biógrafo en Oviedo. "No ha sido posible poner este año, con motivo de su centenario, una placa en su casa natal, porque el propietario se oponía. Pero buscaremos otro tipo de homenaje a este hombre, al que durante la guerra civil española se le quiso borrar del registro municipal con cargo al presupuesto de extinción de alimañas".

Lo que más polémica ha levantado ha sido su intención de no permitir la práctica del boxeo en las instalaciones municipales de Oviedo, medida que ha afectado directamente a Gómez Fou, que entrenaba en el Palacio de los Deportes. La decisión formal se tomará el 10 de enero. Esta fecha se ha retrasado para dar audiencia a la Federación Española de Boxeo. La prohibición del boxeo le ha acarreado varios insultos de la Federación (que se ha querellado) y de practicantes, como el caso de Perico Fernández, que le ha calificado de julay y de vestir mal. "Pero, al margen de este sector, que es minoritario, la mayoría apoya la decisión, porque, indudablemente, el boxeo es un deporte macabro que hay que eliminar. Espero que el Grupo Popular secunde esta iniciativa, tras la postura adoptada por el Vaticano a través de L'Osservatore Romano, que se muestra contrario al boxeo. También el consejero de Cultura de Santander, Ramón Tejada, de AP, se ha mostrado partidario de la supresión".

La principal razón que ha llevado al alcalde de Oviedo a suprimir el boxeo en las instalaciones municipales ha sido la educativa. "No podemos tolerar que niños que asisten a aquellas instalaciones a practicar atletismo de alta competición vean el espectáculo boxístico. Tenemos que evitar esa mala educación, como la que yo recibí de pequeño, tiempo en que era un aficionado tremendo al boxeo". Otras de las razones son médicas y éticas. "Tenemos que cumplir el artículo 15 de la Constitución española, que prohíbe la degradación humana".

La prohibición de la tala y venta de acebola ha tomado "a iniciativa de la Asociación de Amigos de la Naturaleza y Colegio de Biólogos. El acebo es un árbol fundamental para el mantenimiento del equilibrio ecológico y no pueden permitirse abusos".