Las auditorías realizadas demuestran que el sector público está muy mal administrado

Las auditorías que se están llevando a cabo han puesto de relieve, al margen de determinadas irregularidades que han trascendido a la opinión pública, la deficiente administración del sector público español, según ha declarado Juan Francisco Martín Seco, interventor general del Estado, en la clausura de unas jornadas sobre el control del sector público.Las irregularidades detectadas son más llamativas, más noticiables; pero menos graves que la paralización e ineficacia de la gestión por falta de una verdadera contabilidad en la Administración, de una reglamentación interna de actuaciones admin...

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Las auditorías que se están llevando a cabo han puesto de relieve, al margen de determinadas irregularidades que han trascendido a la opinión pública, la deficiente administración del sector público español, según ha declarado Juan Francisco Martín Seco, interventor general del Estado, en la clausura de unas jornadas sobre el control del sector público.Las irregularidades detectadas son más llamativas, más noticiables; pero menos graves que la paralización e ineficacia de la gestión por falta de una verdadera contabilidad en la Administración, de una reglamentación interna de actuaciones administrativas y de una carencia de un control interno del organismo o departamento del sector público de que se trate, según el interventor del Estado. Para Martín Seco es necesario hacer más hincapié en el control de la eficacia que en el de la legalidad, aunque éste siempre sea importante.

El secretario general de Presupuesto y Gasto Público, José Borrell, insistió también en estos planteamientos: la Administración, enfrentada por un lado con una legislación copiosa y casuística y, por otro, con un poderoso órgano de control, ha terminado dando lugar a una actividad de gestión preocupada mucho más por la forma que por el contenido. La gestión en España es, en realidad y en la mayoría de los casos, mera administración burocrática y el gestor, un experto en el laberinto normativo. Borrel reiteró la necesidad de una auditoría de gestión para facilitar información des de el control a quienes tienen que asignar los recursos. José Víctor Sevilla, secretario de Estado de Hacienda, se refirió en estas jornadas a la nueva Administración pública y su control. Tras referirse al proceso de fuerte descentralización que se está produciendo, dijo que a un mayor incremento de los ingresos públicos, que tan fuertemente inciden en el administrado, el colectivo ciudadano ha de tener la seguridad de que su dinero se gasta correctamente, lo que implica una garantía en las técnicas de control. Dichas, técnicas, en opinión de Sevilla, han de sufrir mecanismos de refuerzo, a través de técnicas de selección, muestreo y auditoría.

El ministro de Obras Públicas, Julián Campo explicó su sensación de estar trabajando para el Boletín Oficial del Estado, y la tarea verdaderamente importante -dijo- comienza precisamente a partir de la publicación de las normas en el diario oficial;

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