El nuevo coeficiente de caja limitará la actividad de la banca extranjera

El nuevo coeficiente de caja que debe aprobar el Gobierno representa un freno a las actividades de la banca extranjera, al hacer computables todas las formas de captación de pasivo que se lleven a cabo. En el seno del cuarto grupo de la Asociación Española de Banca Privada (AEB) -en el que están situadas todas las entidades extranjeras-, existe un cierto malestar por el comportamiento de la patronal del sector que consideran no ha defendido, en las conversaciones con el Gobierno, los intereses de estas sociedades financieras.En medios de la banca extranjera existe el temor de que la nueva norm...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

El nuevo coeficiente de caja que debe aprobar el Gobierno representa un freno a las actividades de la banca extranjera, al hacer computables todas las formas de captación de pasivo que se lleven a cabo. En el seno del cuarto grupo de la Asociación Española de Banca Privada (AEB) -en el que están situadas todas las entidades extranjeras-, existe un cierto malestar por el comportamiento de la patronal del sector que consideran no ha defendido, en las conversaciones con el Gobierno, los intereses de estas sociedades financieras.En medios de la banca extranjera existe el temor de que la nueva normativa, a la hora de establecer el volumen de pasivo sobre el que se constituirá el coeficiente de caja, signifique de hecho volver a la situación anterior a la autorización de apertura de oficinas en España. Aducen para ello que el proyecto de modificación vuelve a favorecer a las entidades tradicionales de crédito, con un elevado número de sucursales en todo el país y que obtienen pasivo por el mero hecho de estar presentes en toda la geografía nacional, mientras que a los bancos extranjeros se les limitan las nuevas vías de captación de recursos con los que estar presentes en la actividad financiera.

Ello llevará a las entidades extranjeras a replantearse de nuevo qué tipo de actividad pueden desarrollar para seguir manteniendo la competitividad con la banca nacional. En fuentes cercanas a estos bancos se considera que una alternativa es comprar bancos en crisis, como ha hecho el Citibank con el Levante, y que, otra podría acabar haciendo pensar a los responsables de dichos bancos que su actividad en España es tan limitada que se podría realizar desde otros centros de decisión que no tendrían que estar necesariamente en el país.

A finales de la primera quincena de este mes termina la "recomendación" del Banco de España para que los bancos y cajas de ahorro limitaran al máximo la captación de pasivo mediante mecanismos que no se incluyeran como computables a efectos del coeficiente de caja, como cédulas hipotecarias y letras. El banco emisor, cuando hizo esta recomendación la basó en el importante crecimiento de estas emisiones y en las distorsiones en el control del crecimiento de la masa monetaria.

Seguirá la recomendación

Las posibilidades de que la recomendación se mantenga durante un tiempo indefinido, hasta que se aprueben las modificaciones del actual coeficiente de caja, en las que se recogerá que todos estos activos sean computables, son totales. En algunos medios se considera que Economía quería haber presentado la nueva reglamentación del coeficiente de caja antes de que se acabara el plazo y de ahí las prisas por llevarlo al pasado Consejo de Ministros aunque no fuera aprobado en él.Los bancos y cajas de ahorro han venido ofreciendo nuevos activos al público a lo largo del año para tratar de zafarse de la obligación que tienen de cubrir coeficientes con el pasivo que captan de forma tradicional. Las innovaciones en este terreno se explican porque permiten escaparse de esos coeficientes, lo que proporciona un mayor margen entre el coste real del pasivo y el precio al que se coloca.

La modificación del coeficiente de caja, que afectaría a toda forma de captar dinero que no tuviera la consideración de acciones o participaciones, y que tendría que ser cubierto por bancos -incluidos los oficiales-, cajas de ahorro, cooperativas de grédito, entidades de financiación, sociedades mediadoras del mercado del dinero y todas aquellas que se dediquen a captar pasivo para prestarlo a terceros, será suficiente para que se termine la recomendación.

Archivado En