Pide asilo en Australia un militar filipino que conoce el secreto del asesinato de Aquino
El ex agregado militar de la Embajada de Filipinas en Australia, oficial José Flor, pidió asilo político en Canberra, según fuentes autorizadas australianas. Flor, oficial de Marina, aseguró que conocía los pormenores del asesinato en Manila, el pasado mes de agosto, del líder de la oposición Benigno Aquino, a su regreso de Estados Unidos.
El Gobierno australiano considera la petición presentada por el militar filipino, según fuentes del departamento australiano de Inmigración.José Flor era, tras desempeñar la agregaduría militar de su país en Canberra durante cinco años, de 1972 a ...
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El ex agregado militar de la Embajada de Filipinas en Australia, oficial José Flor, pidió asilo político en Canberra, según fuentes autorizadas australianas. Flor, oficial de Marina, aseguró que conocía los pormenores del asesinato en Manila, el pasado mes de agosto, del líder de la oposición Benigno Aquino, a su regreso de Estados Unidos.
El Gobierno australiano considera la petición presentada por el militar filipino, según fuentes del departamento australiano de Inmigración.José Flor era, tras desempeñar la agregaduría militar de su país en Canberra durante cinco años, de 1972 a 1977, el responsable de la logística naval filipina. Recientemente, en compañía de su mujer y dos hijos, viajó a Australia con visado de turista. Una vez en Canberra se presentó a las autoridades australianas y les confió lo que sabía sobre el asesinato de Aquino.
José Flor teme por ello represalias del Gobierno de Ferdinand Marcos y se siente en peligro de muerte por sus conocimientos sobre el asesinato de Manila, según fuentes diplomáticas en Filipinas.
Sin embargo, estas fuentes no precisaron qué es lo que el ex agregado militar sabía exactamente del asesinato del principal oponente del presidente filipino, Ferdinand Marcos.
Benigno Aquino había sido asesinado a tiros el pasado 21 de agosto, inmediatamente después de descender de un avión que le condujo desde Estados Unidos hasta la capital filipina.
En Norteamérica, Aquino había pasado un exilio de tres años.