Dos misioneras españolas, secuestradas por rebeldes angoleños
Dos misioneras españolas -María Teresa Romero y Julia Montero, de la congregación teresiana-, dos portuguesas y una brasileña, así como un sacerdote uruguayo, han sido secuestrados por miembros de la guerrilla angoleña durante su ofensiva contra la ciudad de Calulo, en el centro de Angola, según revelaron ayer fuentes refigiosas de Lisboa. Otras ocho monjas angoleñas sufrieron también la misma suerte.El secuestro se produjo el pasado día 5, durante el ataque de las guerrillas de¡ movimiento Unión Nacional para la Independencia Total de Angola (UNITA), apoyado por Suráfrica, contra las fuerzas ...
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Dos misioneras españolas -María Teresa Romero y Julia Montero, de la congregación teresiana-, dos portuguesas y una brasileña, así como un sacerdote uruguayo, han sido secuestrados por miembros de la guerrilla angoleña durante su ofensiva contra la ciudad de Calulo, en el centro de Angola, según revelaron ayer fuentes refigiosas de Lisboa. Otras ocho monjas angoleñas sufrieron también la misma suerte.El secuestro se produjo el pasado día 5, durante el ataque de las guerrillas de¡ movimiento Unión Nacional para la Independencia Total de Angola (UNITA), apoyado por Suráfrica, contra las fuerzas del régimen angoleño, apoyado por Cuba y la URSS."
Según las mencionadas fuentes, Calulo resultó "prácticamente arrasada" durante el ataque. Esta ciudad es un centro vital de comunicaciones entre Luanda, capital angoleña, y el sur del país.
El grupo de misioneros fue sorprendido por el ataque de los rebeldes cuando preparaban una fiesta qué debía celebrarse hoy.. Ante la gravedad de la situación, el obispo de Ngunza intentó desplazarse a Calulo, pero tuvo que desistir por la violencia de los enfrentamientos.
Las dos misioneras españolas son naturales de Salamanca. El sacerdote uruguayo secuestrado, José Ramón Uría, que pertenece a la misión católica de Dondo, situada a 100 kilómetros de Calulo, se había desplazado al lugar de los hechos para ayudar en los preparativos de la fiesta.
Según informaciones llegadas.a Lisboa de fuentes de la UNITA, los religiosos y los restantes extranjeros secuestrados, hasta un total de 27 personas, han sido trasladados hacia un lugar seguro en las zonas liberadas.
UNITA divulgó en Lisboa el pasado día 7 un comunicado en el que afirma haber causado la muerte a 315 soldados gubernamentales.