Reactivación del mercado catalán

La sesión de ayer en las bolsas proporcionó a los asiduos una sorpresa, debida a la reactivación que registró el mercado catalán. En las circunstancias actuales de los mercados de valores, no es de extrañar que esa subida de 72 centésimas sea motivo de sorpresas.. El dinero, no demasiado, que propició esta subida, se dirigió sobre todo, a los sectores siderúrgico, de alimentación y de construcción, estos dos últimos tradicionalmente fuertes en este mercado.El contraste con la evolución de esos sectores en los otros mercados, fue apreciable como también lo fue la diferencia en las variaciones d...

La sesión de ayer en las bolsas proporcionó a los asiduos una sorpresa, debida a la reactivación que registró el mercado catalán. En las circunstancias actuales de los mercados de valores, no es de extrañar que esa subida de 72 centésimas sea motivo de sorpresas.. El dinero, no demasiado, que propició esta subida, se dirigió sobre todo, a los sectores siderúrgico, de alimentación y de construcción, estos dos últimos tradicionalmente fuertes en este mercado.El contraste con la evolución de esos sectores en los otros mercados, fue apreciable como también lo fue la diferencia en las variaciones de los índices generales,_ya que Madrid perdía las 12 centésimas que ganó el martes, Bilbao cedió cuatro y Valencia ganó solamente una.

Echa la salvedad de lo sucedido en Barcelona, lo que ocurría en los otros mercados se está convirtiendo en una especie de estribillo para estos comentarios. La atonía, debilidad, o como quiera llamarse en el argot bursátil a la falta de interés de los ahorradores por los títulos de renta variable, empieza a convertirse en un problema en estos momentos en que las instituciones apenas operan y el único dinero que aparece por los mercados tiene un tinte marcadamente especulativo. La pregunta que empieza a plantearse es, cuál será el nivel mínimo de actividad que pueden soportar los mercados.

Los datos de la sesión no tienen muchos puntos destacables, no siendo que, afortunadamente, el descenso de la actividad está trayendo consigo una disminución en las órdenes vendedoras. Pero aun así, el dinero es insuficiente, para hacerles frente y las bajas se van generalizando.

En el sector bancario, el saldo por caja de los siete valores más importantes del grupo, se reducían a poco más de 17.000 títulos, y las repeticiones fueron la nota dominante. Se anunciaba para mañana en este sector, el pago de dividendos por parte de dos de sus componentes, el Hispano y el Vizcaya, pagando este último conjuntamente un dividendo complementario y otro a cuenta del presente ejercicio, con un valor total de 66,78 pesetas.

El casi milagro de la recuperación de los valores eléctricos, se vino al suelo con estrépito ya desde el primer corro, en el que las buenas intenciones del día anterior no pudieron hacer nada para contener. el poco papel que salió.

La situación en los otros sectores fue globalmente positiva, destacando entre ellos el químico que, nuevamente, de la mano de petróleos, parece dispuesto a alegrar algo las sesiones, y el siderúrgico, en el que Duro Felguera y Bendibérica continúan apuntándose mejoras sustanciales, la primera de 16 enteros ante su próxima ampliación de capital, y de siete la segunda que alcanza nuevamente el 500%, al tiempo que sus derechos de suscripción ganaron 50 pesetas. La evolución de estos valores junto con la de Fasa, han situado el indicador de este sector en el 216%, algo insólito en las actuales circunstancias.

Comentario aparte merece la fuerte disminución que está registrando el mercado de letras de cambio, que ya dejó de operar en Bilbao. Los pocos efectos que se negociaron ayer, fueron del mercado secundario y los tipos de descuento practicados hacen que el rendimiento no supere en ningún caso el 15% anual. Habrá que esperar a septiembre para poder ver que efecto tiene sobre los otros activos del mercado la casi total ausencia de contratación en el de letras de cambio.