La Administración contestará el lunes sobre la instalación de un nuevo tren de bandas en caliente

, En la última reunión de la comisión de seguimiento, celebrada anteayer en Madrid se produjo un acercamiento en las posturas mantenidas sobre el futuro de la siderurgia integral española. La posibilidad de un nuevo TBC (tren de bandas en caliente), que iniciaría su producción en 1990, fue argumentada por el representante de Altos Hornos de Vizcaya (AHV) en la mesa, Guillermo Visedo, considerado como uno de los cerebros grises de los planes de reconversión siderúrgica. La Administración se ha comprometido a dar el lunes una respuesta sobre "una fecha concreta para la instalación de un nuevo TB...

, En la última reunión de la comisión de seguimiento, celebrada anteayer en Madrid se produjo un acercamiento en las posturas mantenidas sobre el futuro de la siderurgia integral española. La posibilidad de un nuevo TBC (tren de bandas en caliente), que iniciaría su producción en 1990, fue argumentada por el representante de Altos Hornos de Vizcaya (AHV) en la mesa, Guillermo Visedo, considerado como uno de los cerebros grises de los planes de reconversión siderúrgica. La Administración se ha comprometido a dar el lunes una respuesta sobre "una fecha concreta para la instalación de un nuevo TBC".La propuesta de Guillermo Visedo, calificada por fuentes del Ministerio de Industria y Energía como una "hipótesis de trabajo, se basa en que en 1990 la producción de los dos nuevos TBC remodelados, de 4,2 millones de toneladas, sería inferior a las oportunidades de venta en 600.000 toneladas, que podrían ser aportadas por un nuevo tren de bandas en caliente que comenzaría a funcionar en esa fecha. Esta "hipótesis de trabajo» supone un acercamiento a las cifras de demanda y oportunidades de venta, de CC OO, considerablemente más optimistas que las barajadas por el Gobierno.

Según las previsiones oficiales, con la modernización de los TBC existentes (Ensidesa y Altos Hornos de Vizcaya) las oportunidades de venta de la siderurgia integral estarían garantizadas hasta el año 2000. Para Comisiones Obreras, en 1988 el nuevo TBC ya tendría un hueco en el mercado nacional, además de que su competitividad ampliaría al menos en un 20% la exportación y reduciría las importaciones.

La sugerencia del consejero delegado de Altos Hornos de Vizcaya, Guillermo Visedo, calificada de "bomba" en medios sindicales, supone un punto intermedio, pero ,a la vez, de ser aceptada, supondría un cambio cualitativo radical en la negociación.

Fuentes de CC OO manifestaron ayer que sobre esas bases era posible un acuerdo, de aplicación remitida a tres o cuatro años, "siempre que se fijen fechas concretas para la realización de los compromisos adquiridos". La negociación sobre el futuro de la siderurgia integral, hasta ahora cerrada en posturas irreductibles, entraría así en una fase de desbloqueo y alejaría la solución por decreto, anunciada por el Gobierno para el primero de julio si antes no hay un acuerdo consensuado.

El problema de la ubicación

El tema de la ubicación del nuevo TBC ha sido hasta ahora cuidadosamenmte evitado por CC OO, que no quiere introducir un problema añadido, con condicionantes regionalistas, hasta tanto su instalación no sea un hecho firme. Sin embargo, los representantes de este sindicato en las conversaciones han precisado que la decisión, en ese supuesto, seria adoptada "en menos de 24 horas„. Parece lógico que si la construcción del nuevo Tren de bandas en caliente se decide ahora -debería de iniciarse en 1985 para comenzar a funcionar en 1990, aunque el rendimiento óptimo tardaría dos años en conseguirse- la siderurgia de Sagunto (Altos Hornos del Mediterráneo) sería la elegida, ya que Ensidesa y AHV dispondrían de uno cada uno, modernizado.La postura inicial de la Administración, que remite el estudio para la instalación de un nuevo

TBC al año 2.000, haría más problemático el lugar de ubicación, pues los trenes remodelados, para esa fecha, ya necesitarían ser sustituidos.

El optimismo sindical sobre el desbloqueo de la negociación no fue ayer confirmado por fuentes del Ministerio de Industria y Energía, que se limitaron a precisar que la Administración únicamente se había obligado a responder a una pregunta concreta de UGT y CC OO sobre si se comprometía a fijar una fecha concreta para la instalación del nuevo TBC.

Las mismas fuentes añadieron que era cierto que el clima registrado en la última reunión era más distendido, pero se negaron a pronunciarse sobre si de ello cabía deducir la posibilidad de una solución negociada. El ministro de Industria, Carlos Solchaga, afirmó ayer que la comisión de seguimiento de la siderurgia integral "había avanzado un poco. Se ha cambiado el clima en sentido positivo, tratando de considerar el óptimo programa de inversión, aunque haya costes traumáticos. Desde luego, si la comisión no llega a un acuerdo, el 1 de julio estará publicado el decreto con el programa de inversiones".

El avance sobre el nuevo TBC, hasta ahora punto clave, permitiría pasar a analizar el futuro de las cabeceras (horno alto, arrabio y acería). Hasta ahora, la propuesta a corto plazo de la Administración contempla una producción de cinco millones de toneladas en Ensidesa, dos millones en AHV y cero toneladas en Sagunto (AHM). A medio plazo, se contemplan dos posibilidades. La primera incluye una producción de siete millones de toneladas en Ensidesa, cinco millones en AHV y cero en AHM; la segunda, cinco millones en Ensidesa, dos en AHV y otros dos millones en AHM