El ministro de Defensa explicó en el Congreso la elección del F-18A para el programa FACA

El ministro de Defensa, Narcís Serra, expuso ayer, ante la Comisión de Defensa del Congreso, las razones que llevaron al Gobierno a decidir la compra de 72 aviones F-18A dentro del programa FACA, y aseguró que con ello se garantiza la soberanía y la paz futura de España. Durante más de dos horas, el ministro, acompañado por el subsecretario de su departamento, Eduardo Serra, por el general Sánchez Cabal y por el teniente coronel San Antonio, explicó con detalle las negociaciones y las pruebas realizadas por el Gobierno sobre los aviones que compitieron para este contrato.

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El ministro de Defensa, Narcís Serra, expuso ayer, ante la Comisión de Defensa del Congreso, las razones que llevaron al Gobierno a decidir la compra de 72 aviones F-18A dentro del programa FACA, y aseguró que con ello se garantiza la soberanía y la paz futura de España. Durante más de dos horas, el ministro, acompañado por el subsecretario de su departamento, Eduardo Serra, por el general Sánchez Cabal y por el teniente coronel San Antonio, explicó con detalle las negociaciones y las pruebas realizadas por el Gobierno sobre los aviones que compitieron para este contrato.

Lo que ha primado para la compra del F-18A, dijo el ministro, ha sido, ante todo, el criterio de polivalencia del aparato, que se adapta a las necesidades de nuestro Ejército del Aire, con su gran capacidad para la lucha en el aire y el ataque a tierra.A todas las cualidades técnicas de este avión hay que añadir que su entrada en servicio en los ejércitos de Canadá, Australia y Estados Unidos se ha efectuado este mismo año, con lo que puede absorber en el futuro nuevos sistemas de armas y la incorporación de tecnologías más modernas.

Además, su coste de mantenimiento es inferior al de sus más directos competidores, el también norteamericano F-16 y el Tornado, que presta servicios en los ejércitos alemán y británico. Precisó el ministro que, frente a las otras ofertas, el F-18A se ajusta más a las necesidades de nuestro Ejército del Aire y las supera en cuanto a eficacia, entendiendo ésta como la diferencia entre su poder destructor y su coste. El F-16 dijo que era un avión soberbio para el combate. en el aire, pero menos apropiado para el ataque en tierra y con una tecnología de 20 años de existencia, frente a la nueva del F-18-A.

En cuanto al Tornado, el ministro precisó que las dos versiones existentes de este avión no superan a la polivalencia del F18A. El modelo alemán está capacitado para volar en condiciones climatológicas muy adversas y a baja cota, pero no es adecuado para la lucha en el aire, al igual que su hermano el Tornado, de las fuerzas aéreas británicas.

Renegociación de compensaciones

La compra de los F-18A a la McDonnell-Douglas fue comprometida por el Gobierno anterior, y, su ratificación por el Gobierno socialista, si bien reduciendo en 12 el número de aparatos, se hizo tras una nueva renegociación en las compensaciones tecnológicas norteamericanas a nuestras industrias de construcciones aeronáutica y electrónica.

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Mostró su esperanza de que ésta sea la última ocasión en que España adquiera material fabricado por otros países y en que no haya intervenido en su investigación y coproducción.

Entre las ventajas obtenidas en la renegociación de las conversaciones 5gura la reducción a 10 años del período para su prestación a España, con un plazo de tres años, considerado de gracia, para posibles prórrogas.

Narcís Serra explicó también que el Gobierno había reducido de 84 a 72 el número del F-18A por razones estrictamente presupuestarías, y porque el programa FACA supone un elevado gasto para nuestra economía y repercutirá en las asignaciones presupuestarias para el resto de los Ejércitos.

El ministro de -Defensa hizo balance de la situación actual en nuestro Ejército del Aire y dijo que es parecida a la holandesa y a la belga e inferior a la italiana. Comparándola con países del norte de África, nuestro Ejército dispondría de un número superior de aviones que Marruecos e inferior a Argelia y Libia.

Para 1990 -señaló el ministro-, los gastos de defensa de los tres Ejércitos estarán prácticamente igualados en torno al 33%, siguiendo el criterio de los países europeos.

También dijo que al elegir el avión del programa FACA se tuvo en cuenta que la decisión no incidiera en la entrada de España en la OTAN, y también se valoró el que no se dependiera de un solo proveedor, como hubiera ocurrido de haber adquirido el avión francés Mirage 2000.

Tanto el subsecretario de Defensa como el general Sánchez Cabal y el teniente coronel San Antonio explicaron diversos detafles sobre los criterios seguidos en la evaluación de los diferentes aparatos. El teniente coronel San Antonio señaló que el F-18A ofrece la mayor eficacia respecto a sus competidores, el F-16 y el Tomado, además de poseer un mayor radio de acción y un menor índice de fallos. El Tornado, dijo, es más caro y menos eficaz que el F-18A.

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