Felipe González promete reducir la inflación al 4% al final de la legislatura

La inflación será, al final de la legislatura, de un 4%, una cifra semejante a la que puede darse en Europa por estas fechas, según manifestó ayer el presidente del Gobierno, Felipe González, en el simposio que se celebra en Madrid, sobre la nueva política económica, organizado por el diario norteamericano con sede en París The Internariond Herald Tribune y el Consejo Superior de Cámaras de Comercio. Sin embargo, las cifras aportadas por González fueron calificadas de optimistas por el ministro de Economía y Hacienda, Miguel Boyer, que intervino a continuación y que señaló que el único "objeti...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

La inflación será, al final de la legislatura, de un 4%, una cifra semejante a la que puede darse en Europa por estas fechas, según manifestó ayer el presidente del Gobierno, Felipe González, en el simposio que se celebra en Madrid, sobre la nueva política económica, organizado por el diario norteamericano con sede en París The Internariond Herald Tribune y el Consejo Superior de Cámaras de Comercio. Sin embargo, las cifras aportadas por González fueron calificadas de optimistas por el ministro de Economía y Hacienda, Miguel Boyer, que intervino a continuación y que señaló que el único "objetivo firme" discutido hasta ahora en Consejo de Ministros es el de situar la inflación en un 8% a final de 1984.

Felipe González explicó que el deslizamiento a la baja de la inflación española comenzaría este año con un 12% y seguiría en los años sucesivos con un 8%, un 6% y un 4% a finales de 1986. El presidente intervino ante más de 300 representantes de compañías internacionales y nacionales que se dieron cita en Madrid, ante los que opinó que la lucha antiinflacionista debe acompañarse de una política de rentas salariales para que el excedente empresarial no sólo se mantenga, sino que se recupere, ya que en rauchos casos ha desaparecido el beneficio.Según González, los resultados de la lucha contra la inflación han sido alentadores, ya que en lo que va de año ésta es un punto inferior a la que había en el mismo período de 1982, de tal forma que el 12% propuesto es un objetivo alcanzable que incluso podría reducirse si los empresarios no fueran "excesivamente castigados" por el incremento de las rentas salariales.

Por su parte, Miguel Boyer afirmó que el Gobierno ha optado por la política de mantenimiento de salarios, descartando la posibilidad de un plan de estabilización clásico. Un plan de este tipo, que se asemejaría a las medidas adoptadas en Francia o Suecia, reduciría el poder adquisitivo de los salarios. El ministro subrayó, sin embargo, que el mantenimiento del poder adquisitivo no debe considerarse un, punto de partida para reivindicacíones salariales más extensas. El Gobierno, advirtió, tiene en sus manos la posibilidad de un "reajuste brutal" si se produce un desequilibrio. El presidente reafirmó también su deseo de al canzar la cifra de 800.000 nuevos puestos de trabajo, lo que exigirá un incremento del producto inte rior bruto del 2% en 1984 y del 3% en 1985.

Página 53

Archivado En