Cinco muertos y 30 heridos en un ataque aéreo surafricano contra la capital de Mozambique

El régimen surafricano lanzó al amanecer de ayer sus cazabombarderos sobre la capital de Mozambique, Maputo, para destruir en el país vecino supuestos objetivos del Congreso Nacional Africano (ANC), movimiento de oposición al régimen racista, prohibido en Suráfrica. El ataque ha ocasionado cinco muertos y alrededor de 30 heridos y es una represalia por el atentado con explosivos ocurrido el viernes en Pretoria, reivindicado por el ANC, a consecuencia del cual perecieron 17 personas y resultaron heridas más de dos centenares.

Según manifestaron testigos oculares, y fue confirmado des...

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El régimen surafricano lanzó al amanecer de ayer sus cazabombarderos sobre la capital de Mozambique, Maputo, para destruir en el país vecino supuestos objetivos del Congreso Nacional Africano (ANC), movimiento de oposición al régimen racista, prohibido en Suráfrica. El ataque ha ocasionado cinco muertos y alrededor de 30 heridos y es una represalia por el atentado con explosivos ocurrido el viernes en Pretoria, reivindicado por el ANC, a consecuencia del cual perecieron 17 personas y resultaron heridas más de dos centenares.

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Según manifestaron testigos oculares, y fue confirmado después por Radio Mozambique, pasadas las siete de la mañana de ayer, un número no determinado de aviones surafricanos de reacción Impala III, dotados de cañones y misiles aire-tierra, bombardearon y ametrallaron varias zonas de la ciudad de Matola; suburbio industrial situado a unos cinco kilómetros de Maputo y a unos 70 kilómetros de la frontera surafricana, informa Antoni Castel.Ante el asombro de la gente que en aquella hora se dirigía a su trabajo, los cazas surafricanos comenzaron a atacar las principales arterias de la ciudad. Como resultado, de la incursión, que duró sólo unos minutos, quedaron destruidas varias casas.

Según el relato de una periodista portuguesa que se encontraba en el lugar, participaron en el ataque siete aviones, seis de los cuales lanzaron bombas sobre una zona donde existen únicamente residencias y algunas instalaciones fabriles. El ataque fue corto, pero motivó la intervención de la defensa antiaérea mozambiqueña y de dos cazas de la fuerza aérea de Maputo.

Un portavoz en Lusaka del Congreso Nacional Africano dijo ayer que varios miembros de su organización habían muerto a consecuencia de la operación de castigo surafricana.

El ministro surafricano de Defensa, Magnus Malan, anunció en Pretoria el fin de la acción, informála agencia France Presse, y precisó que todos los aviones habían regresado a sus bases. Según Malan, los Impala III neutralizaron una rampa de lanzamiento de misiles del Ejército mozambiqueño destinada a la protección, de los objetivos bombardeados. El ministro dijo que los objetivos de sus aviones eran el puesto,de mando del ANC, el cuartel general de la organización para la provincia surafricana de Transvaal y un centro de entrenamiento de los nacionalistas.

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Condenas internacionales

A consecuencia del bombardeo han quedado cortadas las comunicaciones entre la República Surafricana y Mozambique y ha sido interrumpido, por razones de seguridad, el vuelo semanal que hacen a Maputo las líneas aérea de Africa del Sur, SAA. Dos aviones fletados por periodistas que pretendían viajar ayer hasta Maputo desde la capital surafricana no fueron autorizados a despegar.Las reacciones internacionales no se han hecho esperar. Mientras Estados Unidos guarda silencio, la Unión Soviética ha denunciado el "ataque bárbaro" del régimen racista de Pretoria contra bases del movimiento nacionalista surafricano. Para la agencia oficial soviética, citada por AFP, "el jefe de los militaristas racistas (Malan) ha intentado una vez más hacer responsable a Mozambique de la intensificación de la lucha de liberación nacional que todos los grupos raciales de la población surafricana llevan a cabo contra el sistema inhumano del apartheid".

El Gobierno británico se ha sumado a la condena por boca de su ministro de Asuntos Exteriores. Londres, cuyo comunicado lamentaba también el atentado del viernes en Pretoria -en el que un coche cargado de explosivos estalló ante el cuartel general del Ejército del Aire-, denuncia la violación de la soberanía mozambiqueña.

Francia ha condenado en términos más enérgicos la "injustificable" acción surafricana "contra el Estado independiente y la República, amiga de Mozambique". El Ministerio francés de Relaciones Exteriores condena en su comunicadó la violación de los derechos del hombre que representa el sistema de separación racial surafricano.

El bombardeo aéreo de Matola, que recuerda la acción llevada a cabo por el Ejército surafricano contra refugiados del Congreso Nacional Africano (ANC) en la misma ciudad en enero de 1981, es el punto culminante de la escalada de tensión que existe entre el régimen racista de Pretoria y los Estados que forman la Línea del Frente (Angola, Botsuana, Zambia, Zimbabue, Tanzania, Mozambique), opuestos a la práctica de la segregación racial en Suráfrica y a la ocupación de Namibia.

La representante en Gran Bretaña del Congreso Nacional Africano, Ruth Monpati, ha calificado la operación de acto "de intimidación dirigido a los Estados de primera línea". La señora Monpati añadió que el ataque estaba preparado desde hace tiempo y no está vinculado directamente al atentado de Pretoria.

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