Peligra la entrevista entre Morán y Pym prevista para el día 25
La crisis diplomática por la que atraviesan las relaciones hispano-británicas podría aconsejar suspender la entrevista que debían celebrar el próximo día 25, en Bruselas, los ministros de Asuntos Exteriores de ambos países, Fernando Morán y Francis Pym. La entrevista, que se celebraría con ocasión de una nueva sesión negociadora España-CEE, fue acordada durante la reciente visita oficial de Morán al Reino Unido, pero la diplomacia española puede preferir aplazarla si antes de ese día no mejoran las relaciones, informa desde Londres nuestra corresponsal Soledad Gallego Díaz
En este clima...
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La crisis diplomática por la que atraviesan las relaciones hispano-británicas podría aconsejar suspender la entrevista que debían celebrar el próximo día 25, en Bruselas, los ministros de Asuntos Exteriores de ambos países, Fernando Morán y Francis Pym. La entrevista, que se celebraría con ocasión de una nueva sesión negociadora España-CEE, fue acordada durante la reciente visita oficial de Morán al Reino Unido, pero la diplomacia española puede preferir aplazarla si antes de ese día no mejoran las relaciones, informa desde Londres nuestra corresponsal Soledad Gallego Díaz
En este clima de enrarecimiento diplomático entre Madrid y Londres, ayer se anució que el Gobierno español ha enviado una nota urgente de protesta a la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI), en la que se denuncia que las maniobras de la Armada británica producen anomalías en el tráfico aéreo civil y vulneran sus normas. "Esta actitud de las autoridades británicas constituye una muestra de insensibilidad respecto a los sentimientos españoles en relación con el problema de Gibraltar", termina la nota de protesta española.Mientras, los 16 buques de la Royal Navy que se encuentran en Gibraltar prosiguieron ayer normalmente sus actividades, pese a las protestas del Gobierno español. Los sindicatos gibraltareños, que habían decidido boicotear el aprovisionamiento de los barcos como protesta por el cierre de los astilleros del Peñón, acordaron ayer reiniciar sus actividades. Los buques serán normalmente abastecidos con alimentos y materiales de repuesto. Según un portavoz de los sindicatos, el boicoteo sólo habrá durado un día, y no los cinco que durará la visita de la Royal Navy, debido a "los ataques del Gobierno español". Según una información de Europa Press, desde Algeciras, existe discrepancia entre los sindicatos gibraltareños en tomo a este boicoteo, y algunos sectores del arsenal de Gibraltar se habrían negado ayer a suministrar alimentos a los buques británicos. La situación económica de Gibraltar, según dichas fuentes, atraviesa una grave crisis por culpa también de las autoridades españolas, porque, al impedir la apertura completa de la verja, niegan a Gibraltar la posibilidad de desarrollar su industria turística. Los astilleros, por su parte, dan trabajo, directa o indirectamente, a cerca de 4.000 personas en una colonia de sólo 30.000 habitantes.
Portavoces del Foreign Office y del Gobierno gibraltareño han intentado restar importancia al enfrentamiento con el Gobierno español, ampliamente recogido y aireado por los medios de comunicación británicos. Tanto el portavoz del ministro de Asuntos Exteriores como el del primer ministro gibraltareño, sir Joshua Hassan, han expresado repetidas veces "la sorpresa" que ha provocado la reacción del Gobierno de Felipe González por un hecho tan "normal" y "habitual" como la presencia de barcos británicos en el puerto del Peñón.
En la Cámara de los Comunes, el ministro de Estado del Foreign Office, Douglas Hurd, manifestó el miércoles que sería "inconcebible" que España ingrese en la CEE mientras se mantengan las restricciones en las comunicaciones entre la colonia británica y la Península.
En las últimas horas, el primer ministro gibraltareño ha mantenido repetidos contactos con Londres y con los miembros de su Gobierno para estudiar la situación.