Libertad provisional en Italia para un presunto agente soviético
El vicedirector de la empresa italosoviética Nafta Italia, Víctor Konaiev, detenido el pasado mes de febrero bajo acusación de efectuar actos de espionaje en territorio italiano, obtuvo ayer la libertad provisional bajo fianza de cerca de cinco millones de pesetas.
Es la primera libertad provisional que concede la Magistratura italiana desde que se iniciaron las investigaciones sobre las actividades de búlgaros y soviéticos en Italia. Una petición en tal sentido fue rechazada el pasado mes de marzo.
La libertad concedida a Konaiev se produce 72 horas después de la expulsión d...
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El vicedirector de la empresa italosoviética Nafta Italia, Víctor Konaiev, detenido el pasado mes de febrero bajo acusación de efectuar actos de espionaje en territorio italiano, obtuvo ayer la libertad provisional bajo fianza de cerca de cinco millones de pesetas.
Es la primera libertad provisional que concede la Magistratura italiana desde que se iniciaron las investigaciones sobre las actividades de búlgaros y soviéticos en Italia. Una petición en tal sentido fue rechazada el pasado mes de marzo.
La libertad concedida a Konaiev se produce 72 horas después de la expulsión de Francia de 47 soviéticos acusados de espionaje, la cual ha relanzado la cuestión de las actividades de los servicios secretos de los países del Este en Occidente.
La investigación sobre el espionaje político-militar soviético en Italia saltó a las primeras páginas de la Prensa con la detención del vicedirector de la compañía aérea soviética Aeroflot en Roma, Víctor Pronin, y del apoderado de la empresa de microfilmes genovesa Microlito, Azeglio Negrino. Este último fue detenido cuando se disponía a entregar varios millares de microfilmes a su enlace soviético en Roma.
Pocos días después, le tocó el turno a Konaiev. Según la Prensa, era el cajero que podía haber entregado cerca de diez millones de pesetas a Negrino por sus informaciones, entre las que figurarían -siempre según las mismas fuentes- secretos militares relativos al avión de combate europeo Tornado. La empresa Aeritalia, que participa en la construcción de ese aparato, ha desmentido que se hubiesen producido fugas de material en ella.
En cualquier caso, Microlito era una de las firmas acreditadas ante el Ministerio de Defensa italiano.