Un muerto y más de 100 heridos, durante una manifestación contra el paro en Sao Paulo

Un manifestante resultó muerto y alrededor de otros 100 heridos en el transcurso de una marcha de protesta contra el paro en la localidad brasileña de Sao Paulo, que congregó el pasado lunes a unas 3.500 personas.Durante varias horas de la tarde del lunes, en el barrio sur de la populosa ciudad brasileña, la zona de mayor industrialización de Latinoamérica, se repitieron los choques entre manifestantes, armados con piedras y barras de hierro, y fuerzas de la policía, que utilizaban gases lacrimógenos para dispersar a la muchedumbre.

Entre los heridos se encuentra en estado grave un niño...

Un manifestante resultó muerto y alrededor de otros 100 heridos en el transcurso de una marcha de protesta contra el paro en la localidad brasileña de Sao Paulo, que congregó el pasado lunes a unas 3.500 personas.Durante varias horas de la tarde del lunes, en el barrio sur de la populosa ciudad brasileña, la zona de mayor industrialización de Latinoamérica, se repitieron los choques entre manifestantes, armados con piedras y barras de hierro, y fuerzas de la policía, que utilizaban gases lacrimógenos para dispersar a la muchedumbre.

Entre los heridos se encuentra en estado grave un niño de nueve años que fue pisoteado por los manifestantes. La policía interrogó a unas 70 personas presuntamente implicadas en el pillaje de tiendas y vuelco de un coche de las fuerzas del orden.

La región sur de Sao Paulo es escenario de manifestaciones obreras desde hace cuatro años, informa Luis Mir. La protesta se recrudeció a raíz de la liberalización del régimen y la muerte del obrero Dias da Silva en noviembre de 1979, en una zona que concentra a 600.000 obreros y agrupa a las más importantes empresas brasileñas.

Las actuales manifestaciones obedecen a la protesta contra el paro, que crece día a día. El líder sindical de Sao Paulo Eulalio Bueno VidigaI comentó que el alto índice de paro justifica la protesta pacífica, pero condenó la violencia y alertó a sus seguidores para que mantuviesen "la cabeza fría" y evitaran desgracias mayores.

Ayer, el gobernador de Sao Paulo, Franco Montoro, prometió la creación de empleos comunitarios para dar puestos de trabajo a las familias en peor situación económica.

Por su parte, el abogado laboralista Almir Pazzianotto se quejó de la actuación de las fuerzas antidisturbios. Él mismo fue golpeado por la policía durante las huelgas de 1979. Al asumir su cargo actual de secretario gubernativo, de Trabajo dijo que no permitiría el uso de la violencia policial contra los huelguistas.

En las recientes manifestaciones, cuando la policía actuaba más contundentemente contra los huelguistas, éstos comenzaron a volcar autobuses y prenderles fuego. La policía consiguió detener a los manifestantes cuando una docena de automóviles particulares y una treintena de autobuses habían sido incendiados.

Los militares, que consideran las protestas como una acción de la izquierda contra el Gobierno solicitan de Brasilia mano dura para reprimir las manifestaciones, a la vez que acusan al Gobierno de Sao Paulo de estar dominado por los comunistas, grupo minoritario en la afianza política que eligió a Franco Montoro.

Montoro advirtió a los comandantes de la Policía Militar que no se permitiría la violencia contra mujeres y niños, como esos jefes habían autorizado en la represión de la manifestación de parados.