El Ayuntamiento de Bilbao se desentiende de las escuelas en peligro de ruina

El Ayuntamiento de Bilbao ha decidido desentenderse oficialmente del problema planteado en siete escuelas públicas de la capital vizcaína, cuyo desalojo había sido recomendado por el Colegio de Arquitectos, al haberse detectado fisuras y grietas en sus estructuras. La mayoría peneuvista de la comisión permanente de la Corporación consideró que el tema es competencia del departamento de Educación del Gobierno vasco.La comisión de obras y servicios de la Corporación bilbaína había ordenado la semana pasada el desalojo de los edificios, una vez que el Colegio de Arquitectos vasconavarro advir...

El Ayuntamiento de Bilbao ha decidido desentenderse oficialmente del problema planteado en siete escuelas públicas de la capital vizcaína, cuyo desalojo había sido recomendado por el Colegio de Arquitectos, al haberse detectado fisuras y grietas en sus estructuras. La mayoría peneuvista de la comisión permanente de la Corporación consideró que el tema es competencia del departamento de Educación del Gobierno vasco.La comisión de obras y servicios de la Corporación bilbaína había ordenado la semana pasada el desalojo de los edificios, una vez que el Colegio de Arquitectos vasconavarro advirtiera sobre el estado de peligro de sus estructuras. Sin embargo, la intervención del departamento autónomo de Educación ha dejado sin efecto la orden municipal, ya que, según el criterio del mencionado departamento, únicamente es necesario el desalojo en la zona de los edificios en los que actualmente se realizan trabajos de apuntalamiento.

"En vista de las seguridades dadas por el departamento de Educación, el Ayuntamiento se desentiende del problema de esas escuelas", ha declarado el teniente de alcalde José Olaetxea, quien ha declinado también la responsabilidad de la Corporación "sobre lo que pase o deje de pasar en esos colegios, porque no están recepcionados por él, y el departamento de Educación ha dejado bien claro que es competencia suya".

Se da la circunstancia de que, a pesar de que la construcción de tales escuelas fue realizada entre los años 1972 y 1973, dentro de "un plan de urgencia escolar de Bilbao y provincias", debido a los defectos detectados en las obras, el Ayuntamiento bilbaíno no llegó a aceptar nunca la recepción oficial de los edificios, que hubiera conllevado la responsabilidad en el mantenimiento y conservación de los mismos.

Paralelamente, la Corporación bilbaína rechazaba una propuesta para la convocatoria urgente de una reunión entre las partes implicadas en el problema de las escuelas (delegación de Educación, Colegio de Arquitectos y el arquitecto responsable del proyecto y la reparación de los centros) para el esclarecimiento sobre el estado de seguridad de las mismas, dada la preocupación entre los padres de los escolares por la situación.