En la Constitución caben las opciones independentistas, según Peces-Barba

"Cualquier opción politica, incluidas las independentistas, cabe dentro de los contenidos materiales de la Constitución. Lo que no cabe es defender estas opciones políticas al margen de las reglas de juego de la propia Constitución", afirmó el presidente del Congreso de los Diputados, Gregorio Peces-Barba, durante una conferencia de Prensa celebrada en la tarde de ayer en Pamplona, con ocasión de la visita oficial, de dos días de duración, que realiza a Navarra, invitado por el presidente del Parlamento de Navarra, el también socialista, Victor Manuel Arbeloa.Peces-Barba manifestó que la propu...

"Cualquier opción politica, incluidas las independentistas, cabe dentro de los contenidos materiales de la Constitución. Lo que no cabe es defender estas opciones políticas al margen de las reglas de juego de la propia Constitución", afirmó el presidente del Congreso de los Diputados, Gregorio Peces-Barba, durante una conferencia de Prensa celebrada en la tarde de ayer en Pamplona, con ocasión de la visita oficial, de dos días de duración, que realiza a Navarra, invitado por el presidente del Parlamento de Navarra, el también socialista, Victor Manuel Arbeloa.Peces-Barba manifestó que la propuesta de pacificación para el País Vasco realizada por el lendakari, Carlos Garaikoetxea, al presidente del Gobierno español, Felipe González, era una buena idea, "siempre que no existan condiciones previas en las negociaciones". Peces-Barba expresó su extrañeza por la inclusión de la denominada cuestión navarra, "por cuanto no tiene este tema incidencia en la pacificación del País Vasco". "El tema de Navarra", añadió, "tiene un tratamiento específico en la Constitución y son los propios navarros quienes tienen que pronunciarse sobre él".

Finalmente al ser preguntado sobre la posible legalización del aborto terapeútico, Peces-Barba, expuso una serie de consideraciones ético-morales y jurídicas en torno a este tema e hizo, igualmente, mención a la realidad que supone el que miles de mujeres aborten anualmente en España. "El Estado", concluyó, "no puede ignorar esta situación. Todo lo demás es puro-fariseismo y pura hipocresía".