La Federación de Fútbol será sometida a una auditoría complementaria

La posibilidad de realizar una auditoría complementaria sobre la contabilidad de la Federación Española de Fútbol en el año 1979 y la impresión de que los rectores económicos de la entidad llevaron con muy escasa eficacia estos temas son conclusiones sobre las que se opera en la actualidad en el Tribunal de Cuentas. Este organismo recibirá dentro de pocos días las conclusiones del juez instructor y pasará a actuar oficialmente sobre el caso. El Ministerio de Hacienda, por tanto, no sancionará a la Federación de Fútbol y si lo hará el citado Tribunal de Cuentas.A la vista de toda la documen...

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La posibilidad de realizar una auditoría complementaria sobre la contabilidad de la Federación Española de Fútbol en el año 1979 y la impresión de que los rectores económicos de la entidad llevaron con muy escasa eficacia estos temas son conclusiones sobre las que se opera en la actualidad en el Tribunal de Cuentas. Este organismo recibirá dentro de pocos días las conclusiones del juez instructor y pasará a actuar oficialmente sobre el caso. El Ministerio de Hacienda, por tanto, no sancionará a la Federación de Fútbol y si lo hará el citado Tribunal de Cuentas.A la vista de toda la documentación que se ha utilizado sobre la contabilidad de la Federación Española de Fútbol, se tiene la impresión de que no existe una certeza absoluta sobre lo que realmente ha ocurrido con ciertas cantidades.

Diversas fuentes, las que han tenido conocimiento sobre los trabajos que se han llevado a cabo, coinciden en afirmar que la contabilidad de la Federación Española de Fútbol no sólo era muy deficiente sino que sorprende que sea tan rudimentaria tratándose de un organismo que habitualmente trabajaba con cifras de dinero importantes.

Los principales problemas, dando por sentado que la Federación Española de Fútbol ha cometido una serie de infracciones, se dan a la hora de matizar las cantidades de dinero que se han de devolver porque no están plenamente justificadas. Existe un problema de interpretación sobre una cantidad superior a los 300 millones y registrada en la Federación como inversiones que se contabilizan en el fondo de reserva. Sobre esta cantidad existirá una lucha jurídica por decidir si la Federación Española recibía el dinero vía subvención o vía canon. Si se determina que lo que recibía era una subvención, la Federación Española se vería abocada a una situación muy delicada.

Por otro lado, un grueso igualmente muy importante de dinero sin justificar corresponde a cantidades que se repartieron por las distintas federaciones provinciales y de cuyo destino final se sabe muy poco. En este sentido, hay federaciones provinciales que, según una fuente del Ministerio de Hacienda, han logrado justificar ciertos gastos aun contando con una contabilidad "rudimentaria" y otras que no lo han podido hacer. En este caso, se señalan como federaciones más eficaces la Balear y la Valenciana.

Se dan casos de federaciones que no pueden justificar documentalmente ni siquiera los gastos de alquiler del local que utilizan, lo que da una idea de la falta de control contable. Sin embargo, las justificaciones solicitadas no han llegado y ese será una trabajo que heredará el Tribunal de Cuentas, quien, con probabilidad, quizás solicite una auditoría complementaria, para poder tener un conocimiento correcto de lo que realmente ha pasado en dicha Federación. No se descarta, y entra en el capítulo de interpretaciones, que la Federación Española sea la única responsable, sino que también la responsabilidad de ciertas cifras afecte a determinados clubes de fútbol, que recibieron cantidades de dinero cuyo destino no se ha justificado.

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