Tribuna:

Hacia la detención deI programa nuclear

Cuando a finales del presente año sea conectado a la red el primer grupo de Ascó, en Tarragona, habrá cinco nucleares en servicio. El turno seguiría, en 1983, por Lemóniz I, Alamaraz II y Cofrentes. Otras siete, que iniciarían paulatinamente su actividad hasta 1988, según el programa de autorizaciones, están en fase de construcción: Ascó II, Lemóniz II, Trillo I, Valdecaballeros I, Vandellós II, Trillo II y Valdecaballeros II. El plan lo completarían tres más con autorización previa: Vandellós III, Sayago y Regodolla.Sin embargo, las anomalías registradas durante los últimos meses en la cuarta...

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Cuando a finales del presente año sea conectado a la red el primer grupo de Ascó, en Tarragona, habrá cinco nucleares en servicio. El turno seguiría, en 1983, por Lemóniz I, Alamaraz II y Cofrentes. Otras siete, que iniciarían paulatinamente su actividad hasta 1988, según el programa de autorizaciones, están en fase de construcción: Ascó II, Lemóniz II, Trillo I, Valdecaballeros I, Vandellós II, Trillo II y Valdecaballeros II. El plan lo completarían tres más con autorización previa: Vandellós III, Sayago y Regodolla.Sin embargo, las anomalías registradas durante los últimos meses en la cuarta y quinta central -Almaraz I, que conectó a la red en mayo de 1981, y la citada Ascó I- han planteado interrogantes adicionales sobre el cumplimiento de los proyectos. No sólo por sus propios problemas técnicos, sino porque se trata de las dos primeras nucleares de la segunda generación y éstos se extienden a sus cinco gemelas: Lemóniz I, Almaraz II, Cofrentes, Ascó II y Lemóniz II.

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Paralelamente, El PSOE, partido ganador de las elecciones legislativas, ha propuesto en su programa la "estricta complementariedad" de la energía nuclear. No quiere que la potencia instalada supere en 1990 los 7.500 megavatios, que serían alcanzados en 1985 si se cumpliesen los planes vigentes más avanzados. Los socialistas se han mostrado partidarios de una detención ordenada del resto.

En medios del sector eléctrico se apunta entre las centrales afectadas en principio por la hipotética detención Trillo l y II, Vandellós II, Sayago, Valdecaballerosl y II y Regodolla. No obstante, los efectos de las recientes inundaciones en la zona levantina han provocado también algunas dudas sobre el futuro de Cofrentes, una de las tres centrales con entrada prevista en servicio durante el próximo año.

Iba a ser éste, en coricreto, el octavo grupo conectado a la red.

Según los mismos medios del sector, cuyas estimaciones no han sido contrastadas con las empresas promotoras, la construcción de Cofrentes, prácticamente terminada, habrá requerido unos 250.000 millones de pesetas, incluyendo todos los gastos y equipos comprometidos. Igualmente, Trillo llevará comprometidos proyectos por más de 200.000 millones, de pesetas, al igual que los dos grupos de Valdecaballeros.

En Vandellós III los compromisos no superarán probablemente los 40.000 millones de pesetas. Sayago y Regodolla quedarán por debajo, respectivamente, de los 20.000 y 10.000 millones de pesetas.

Entre 1981 y 1984, el Plan Energético había previsto invertir 716.000 millones, de pesetas, pero cada vez el período de construcción es más dilatado (diez años para Almaraz I, catorce o quince para las de la tercera generación), por lo que dicha cifra puede ser ampliamente superada.

La obra en curso se estima en cerca de un billón de pesetas. Pese a tan fuertes inversiones o compromisos de inversión, a cuyo coste efectivo habría que añadir los beneficios fiscales, la nuclear apenas cubre el 2% de la energía consumida en España, incluido el petróleo.

Frente a los 930 o 975 megavatios de potencia de las nucleares de la segunda generación -algún grupo de la tercera fue diseñado con 1.097-la pionera en España -José Cabrera, situada en Zorita (Guadalajara)- tiene 160 megavatios y funciona desde 1969. Dos años después se puso en marcha Santa María de Garoña (Burgos), con 460 megavatios. Y en 1972, antes de estar casi diez años sin nuevas aportaciones, empezó la hispano-francesa de Vandellós I (Tarragona), con 500 megavatios.

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