Cartas al director

Retraso en el cobro del desempleo

Es mi deseo denunciar públicamente una situación que se está padeciendo desde hace algunos meses y que afecta a un gran número de personas, en el que, desgraciadamente, me encuentro.Se trata del retraso en el cobro del subsidio de desempleo a los que nos encontramos en situación de parados. Algunos la vienen padeciendo desde hace un año; yo, concretamente, desde el mes de marzo del año en curso.

Aparentemente, no hay motivos justíficados, aunque probablemente, lo más acertado sería decir que los motivos no son ni justificados ni injustificados, porque no los hay de ninguna clase.
...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Es mi deseo denunciar públicamente una situación que se está padeciendo desde hace algunos meses y que afecta a un gran número de personas, en el que, desgraciadamente, me encuentro.Se trata del retraso en el cobro del subsidio de desempleo a los que nos encontramos en situación de parados. Algunos la vienen padeciendo desde hace un año; yo, concretamente, desde el mes de marzo del año en curso.

Aparentemente, no hay motivos justíficados, aunque probablemente, lo más acertado sería decir que los motivos no son ni justificados ni injustificados, porque no los hay de ninguna clase.

En esta situación nos encontramos, como digo, gran número de personas que pertenecemos a la oficina de Santa Leonor, 8, distrito de Ciudad Lineal. También tenemos conocimiento de que esto se está repitiendo en otras oficinas.

Haz que tu opinión importe, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

En nombre de todos los compañeros que estamos en esta situación pido que los responsables se tomen en serio su trabajo, de lo contrario, entre la ineficacia e incompetencia de unos y la desconfianza de otros, vamos a contribuir a crear un país en el que se arraigue el vandalismo, pero un vandalismo sin alternativas, porque cuando un padre de familia oye decir a sus hijos que tienen hambre, éste hará cualquier cosa por sacar adelante a su familia.

Todos nos hacemos unas cuantas preguntas. ¿Cuánto tiempo va a durar esta situación? ¿Será necesario que hagamos la correspondiente denuncia en Magistratura? ¿Cuál y dónde está el freno que hace que esa suma de dinero no llegue a sus destinatarios?

De momento, lo que nos interesa es que esto sea de la opinión pública, y esperamos que los responsables hayan terminado sus vacaciones, se reincorporen a sus trabajos y nos den soluciones. De no ser así, siempre nos queda el recurso de rezar, o, en su caso, que el Papa, en su visita a nuestro país, nos haga el milagro. /

Archivado En