Cartas al director

Paz para Galilea

Después del triunfal éxito de la operación Paz para Galilea, hay que solicitar la concesión de sendos premios Nobel para Menájem Beguin y Ariel Sharon. El primero ya lo tiene, pero se merece un segundo por su espíritu pacifista y su denodada contribución a la causa de la Pax reganiana en el Próximo Oriente.Es admirable el humanismo y los valores religiosos de un tan gran creyente en Dios como Ariel Sharon, que dice "odiar la guerra", pero se siente enormemente satisfecho de "haber aplastado a la OLP". Desde que el mundo es mundo no ha habido un solo militarista ni fascista que de...

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Después del triunfal éxito de la operación Paz para Galilea, hay que solicitar la concesión de sendos premios Nobel para Menájem Beguin y Ariel Sharon. El primero ya lo tiene, pero se merece un segundo por su espíritu pacifista y su denodada contribución a la causa de la Pax reganiana en el Próximo Oriente.Es admirable el humanismo y los valores religiosos de un tan gran creyente en Dios como Ariel Sharon, que dice "odiar la guerra", pero se siente enormemente satisfecho de "haber aplastado a la OLP". Desde que el mundo es mundo no ha habido un solo militarista ni fascista que declarase públicamente "odiar la guerra". A este respecto es sumamente aleccionador leer los discursos de Hitler antes de pacificar Europa en bien de la paz. /

Madrid.

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