Dura condena de Felipe González a la pastoral sobre la LOAPA

"Me encantaría ver pastorales de los obispos vascos cuando matan a un civil, a un militar o a un trabajador de Lemóniz", dijo ayer el secretario general del Partido Socialista Obrero Español, Felipe González, sobre el documento de condena de la Ley Orgánica de Armonización del Proceso Autonómico hecha pública el sábado por los prelados. Para el líder del principal partido de la oposición, "la cuestión no es si entrar a enjuiciar si los obispos deben pronunciarse o no en temas que no son de su competencia. Lo preocupante es que no exista una lógica y que a veces lo hagan y a veces no". El Parti...

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"Me encantaría ver pastorales de los obispos vascos cuando matan a un civil, a un militar o a un trabajador de Lemóniz", dijo ayer el secretario general del Partido Socialista Obrero Español, Felipe González, sobre el documento de condena de la Ley Orgánica de Armonización del Proceso Autonómico hecha pública el sábado por los prelados. Para el líder del principal partido de la oposición, "la cuestión no es si entrar a enjuiciar si los obispos deben pronunciarse o no en temas que no son de su competencia. Lo preocupante es que no exista una lógica y que a veces lo hagan y a veces no". El Partido Socialista de Euskadi, por su parte, difundió ayer un comunicado en el que afirmaba que el texto es "inadmisible e intolerable en un sistema democrático", así como que se trata de "una clara intromisión en temas que pertenecen a la única soberanía de las Cortes Generales y a los representantes del pueblo español legítimamente elegidos por éste".Por el contrario, el presidente del Consejo Nacional del Partido Nacionalista Vasco, Xabier Arzallus, consideró que "los obispos se han pronunciado claramente en favor de la paz". "La LOAPA es una burla", afirma también Arzallus, "y los obispos lo han captado, han recogido el pesar profundo de la mayoría de este pueblo y han dado publicidad a sus críticas".

El dirigente del PNV rechaza que se trate de una toma de postura política por parte de los prelados. "El deseo de que este pueblo encuentre vías pacíficas es muy importante", asegura, "y nada tiene que ver con la política, sino con la convivencia más elemental".

Páginas 10 y 11

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