Europa puede declarar un régimen de excepción para el sector petroquímico

El sector de la petroquímica y plásticos de los diez países comunitarios atraviesa una grave crisis, con pérdidas acumuladas por valor de más de 2.500 millones de dólares al año y una producción que no llega al 65% de su capacidad.

Para analizar esta. crisis y estudiar la posibilidad de establecer acuerdos internos o un "régimen de excepción" similar al que se aplica a la siderurgia, se han reunido en Bruselas tres miembros de la Comisión Europea y los representantes de las seis mayores empresas del sector en la CEE.

Por el momento, las conversaciones se mantienen a un nivel ...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

El sector de la petroquímica y plásticos de los diez países comunitarios atraviesa una grave crisis, con pérdidas acumuladas por valor de más de 2.500 millones de dólares al año y una producción que no llega al 65% de su capacidad.

Para analizar esta. crisis y estudiar la posibilidad de establecer acuerdos internos o un "régimen de excepción" similar al que se aplica a la siderurgia, se han reunido en Bruselas tres miembros de la Comisión Europea y los representantes de las seis mayores empresas del sector en la CEE.

Por el momento, las conversaciones se mantienen a un nivel puramente exploratorio, porque no existe un acuerdo entre las propias empresas interesadas.

Mientras que los franceses -promotores de la reunión- y los belgas -cuya firma Solvay atraviesa momentos malos- desearían llegar antes de fin de año a la adopción de una regla de control del mercado interior, con reducciones drásticas en la producción de cinco elementos básicos de la petroquímica, la empresa británica ICI mantiene grandes reservas, aunque su director general acudió ayer a la capital belga.

Acuerdos necesarios

Cualquier acuerdo exige la aprobación previa de la Comisión Europea, porque según el Tratado de Roma la libre competencia exige que no existan ententes entre las empresas que puedan moldear el mercado, de acuerdo con sus propios intereses.Sin embargo, un portavoz autorizado de la Comisión afirmó que, dadas las características de la crisis, era probable que los tres comisarios, Davignon (encargado de cuestiones industriales), Narjes (encargado de los mercados internos) y Andriessen (responsable de la garantía de la libré competencia), se muestren favorables a algún tipo de acuerdo entre las firmas Hoechst, Solvay, Ici, Shell, Emi y Rhône-Poulenc.

En cualquier caso, se excluye que dicho estado de emergencia -que afectaría, finalmente, a veinticuatro empresas- comprenda acuerdos sobre precios mínimos, limitándose a fijar medidas nacionales coordinadas que ayuden a reabsorber la superproducción actual en el mercado.

El régimen especial que pueda aplicarse, a la petroquímica de la Comunidad Económica Europea afectaría también a países no miembros, aunque de forma indirecta. Algunas de las empresas implicadas actúan en España. Por ejemplo, la compañía británica Ici ha anunciado que realizará un intercambio con el grupo español Ertisa, que le permitirá, según fuentes inglesas, retirarse de la industria de fabricación de fenol en nuestro país.

Según fuentes francesas, los grandes productores galos desearían ver fijado un sistema de cuotas que, vigilado por la Comisión, estableciera las capacidades de producción de cada empresa en concreto. Siempre, según dichas fuentes, el estado de crisis no implicaría graves consecuencias sociales.

Archivado En