Presur, rentable o no rentable
Acabo de leer su editorial del 1 de junio, ¿Quién pagará los platos rotos en Presur?, sobre el incierto futuro económico de esta planta de pellets.Pero, señor director, hace escasamente un mes este tema ocupó la primera de todos los medios de comunicacion. El Gobierno fue entonces el blanco de todas las iras, las presiones y las urgencias de unos obreros que defendían sus puestos de trabajo (comprensible) y de unos políticos que, haciéndose eco de sus respectivos partidos, se encerraban, peroraban, explicaban, etcétera.
El Gobierno, después de sucesivas reuniones y ...
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Acabo de leer su editorial del 1 de junio, ¿Quién pagará los platos rotos en Presur?, sobre el incierto futuro económico de esta planta de pellets.Pero, señor director, hace escasamente un mes este tema ocupó la primera de todos los medios de comunicacion. El Gobierno fue entonces el blanco de todas las iras, las presiones y las urgencias de unos obreros que defendían sus puestos de trabajo (comprensible) y de unos políticos que, haciéndose eco de sus respectivos partidos, se encerraban, peroraban, explicaban, etcétera.
El Gobierno, después de sucesivas reuniones y deliberaciones, decide dar luz verde a este proyecto. Y ahora, cuando ya está todo en marcha, la línea editorial del periódico más leído de España insinúa que este proyecto va a resultar irrentable, caro, inoportuno... y que el cauce seguido para forzar al Gobierno a su aprobación es peligroso.
Señor director, ¿por qué EL PAÍS no se manifestó antes en este sentido?, ¿por qué ese miedo a llevar la contraria a ciertas corñentes de opinión?, ¿quién pagará los platos rotos de ésta y de otras demagogias? /