Entrevista:

El arzobispino de Dublín: "La acción pastoral de la Iglesia debe realizarse aqui y no en el cielo"

En este viaje del Papa al Reino Unido, la inquieta Irlanda ha estado siempre a su lado en el bien y en el mal. Las ciudades más influenciadas por el catolicismo irlandés, con fuerte carga nacionalista, están siendo las más entusiastas con Karol Wojtyla. Pero ha sido también un irlandés, el extremista pastor protestante de la Iglesia Libre Presbiteriana, lan Paisley, quien lo ha amargado, organizándole las demostraciones mayores y más violentas de protesta con pancartas que decían: "Cristo libera, el Papa esclaviza".

EL PAIS ha entrevistado al arzobispo de Dublín, la capital de Irlanda, ...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

En este viaje del Papa al Reino Unido, la inquieta Irlanda ha estado siempre a su lado en el bien y en el mal. Las ciudades más influenciadas por el catolicismo irlandés, con fuerte carga nacionalista, están siendo las más entusiastas con Karol Wojtyla. Pero ha sido también un irlandés, el extremista pastor protestante de la Iglesia Libre Presbiteriana, lan Paisley, quien lo ha amargado, organizándole las demostraciones mayores y más violentas de protesta con pancartas que decían: "Cristo libera, el Papa esclaviza".

Más información

EL PAIS ha entrevistado al arzobispo de Dublín, la capital de Irlanda, Ryan Dermot, teólogo, moralista y experto en la Biblia, para quien la Iglesia "debe ser independiente" de los conflictos, y apoya la acción del Papa, porque, según él, la función "pastoral no se hace en el cielo, sino en la tierra".

Pregunta: ¿Qué consecuencias piensa que podrá tener esta visita del Papa al Reino Unido?

Respuesta: Creo que obligará a reflexionar a todos, no sólo a los católicos. Va quedando claro, por ejemplo, en los discursos y en los gestos de Juan Pablo II que los problemas que se plantean hoy todos los cristianos son, más que de tipo doctrinal, de orden práctico y concreto. Problemas morales como la guerra, la violencia, los marginados y todos los frutos perversos producidos por el capitalismo moderno.

Conocer lo que pasa fuera, es entender lo que pasará dentro, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

La guerra no es inevitable

P. ¿Cuál piensa que ha sido la afirmación más importante del Papa pronunciada hasta ahora en tierra británica?

R. Su insistencia en afirmar que no es cierto que no se pueda hacer nada para resolver los problemas actuales que atenazan a los hombres de nuestra generación. Como cuando ha dicho, por ejemplo, que no es verdad que la guerra es inevitable para resolver los conflictos entre los pueblos.

P. ¿No le parece que en el campo del ecumenismo se lleva demasiados años sin salir de los gestos simbólicos para pasar a las decisiones prácticas y concretas?

R. Eso puede parecer a nivel de cumbre. En la base no es así. En todos estos años se están realizando aquí miles de contactos entre militantes católicos y protestantes. Se trata de grupos de empeño social, de estudio y de oración. Estos encuentros son a veces más importantes que los realizados a nivel de jerarquías, que por obvias razones tienen que ser muchas veces diplomáticos y con una cierta carga de compromiso.

P. ¿Qué pide hoy la base concretamente a sus respectivas jerarquías?

R. Desearían respuestas ya definitivas a algunos problemas muy concretos, como, por ejemplo, el de los matrimonios mixtos entre católicos y protestantes, que aquí es muy sentido y crea tensiones.

P. ¿Qué entidad tienen los grupos que están contestando estos días al Papa y que son sobre todo de origen irlandés?

R. Mire, el problema no es sólo de enfrentamiento entre católicos y protestantes, sino también el de estos últimos entre ellos. Existen no pocas tensiones e intemperancias entre anglicanos, metodistas, calvinistas y presbiterianos. Sería simplista pensar que se habrá conseguido la reunificación de los cristianos cuando se haya obtenido la unión entre católicos y anglicanos. Basta pensar que en Estados Unidos existen hoy más de trescientas iglesias protestantes diversas, muchas veces enfrentadas entre ellas.

Acción pastoral

P. ¿Piensa que el Papa debería haber venido al Reino Unido a pesar del conflicto actual en las Malvinas?

R. Creo que es importante que el Papa haya convocado, antes de decidir el viaje, a los obispos ingleses y argentinos conjuntamente. Como lo es el hecho de que haya querido distinguir entre acción "pastoral" y acción estrictamente "política". De este modo puede defender la paz y hablar contra la guerra incluso en un país en conflicto. La Iglesia debe ser independiente, pero al mismo tiempo se reserva siempre su derecho de intervenir en las actitudes políticas que juzga contrarias al evangelio.

P. Entonces ¿por qué el secretario de Estado cardenal Agostino Cassaroli fue a encontrarse de noche en Londres con Margaret Thatcher?

R. Lo importante y simbólico es que el Papa no se haya visto con ella. Por otra parte, la acción pastoral, la Iglesia no la hace en el cielo. La tiene querealizar aquí en la tierra, con los hombres, y no es siempre fácil saber dónde termina la acción pastoral a favor de la paz y dónde empieza la política.

P. ¿Es verdad que existen discrepancias entre ustedes los obispos católicos de estas tierras del Reino Unido y de Irlanda sobre la condena de la guerra?

R. Sí, es cierto. En esta materia no todos pensamos lo mismo. El Papa, sin embargo, ha sido muy explícito en condenar todo tipo de guerra como medio para resolver los conflictos entre los pueblos.

P. Y usted personalmente ¿qué piensa? ¿Acepta como compatible con el evangelio la guerra en algunas circunstancias?

R. Creo que hay que admitirla sólo para defenderse.

El arzobispo de Dublín se queda pensativo, y con una leve sonrisa añade: "Claro que es difícil imaginarse a Cristo con una espada en la mano para defender a su patria. El problema de la guerra y de la violencia contra la injusticia es uno de los más delicados, difíciles y contradictorios para un cristiano. Es un problema complejo de la intimidad, porque el cristiano no se despoja de su humanidod, no renuncia a ser hombre, y sufre las contradicciones de su doble identidad de hombre empeñado en la lucha por la justicia y al mismo tiempo ciudadano de un reino nuevo cuyo fruto principal y definitivo no puede ser otro que la paz".

Archivado En