Duplicados los gastos previstos en la inauguración del Mundial-82

El presupuesto de los actos de la ceremonia inaugural del Mundial 82 se ha disparado, según aseguró uno de los miembros del Comité Organizador e integrante del grupo que se reúne semanalmente en el Palacio de la Moncloa, bajo la presidencia de Rodolfo Martín Villa, vicepresidente primero del Gobierno. Los actos del próximo 13 de junio en el Camp Nou de Barcelona, superarán los 100 millones de pesetas, cuando, al adjudicar su realización, se indicó que no podrían gastarse más de 77 millones de pesetas, cifra en que se firmó el contrato con el publicista barcelonés Víctor Sagi.

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El presupuesto de los actos de la ceremonia inaugural del Mundial 82 se ha disparado, según aseguró uno de los miembros del Comité Organizador e integrante del grupo que se reúne semanalmente en el Palacio de la Moncloa, bajo la presidencia de Rodolfo Martín Villa, vicepresidente primero del Gobierno. Los actos del próximo 13 de junio en el Camp Nou de Barcelona, superarán los 100 millones de pesetas, cuando, al adjudicar su realización, se indicó que no podrían gastarse más de 77 millones de pesetas, cifra en que se firmó el contrato con el publicista barcelonés Víctor Sagi.

Este fue uno de los temas que desde un principio se plantearon en las reuniones que un grupo de personas relacionadas con la organización del Mundial-82 celebran cada semana en el Palacio de la Moncloa, presididas por Martín Villa, y en el que se insistió de nuevo el pasado lunes, fecha de la última reunión. El incremento de los gastos de la ceremonia inaugural del Mundial-82 es uno de los capítulos que afectó al desfase presupuestario que registra el Comité Organizador del Campeonato y que originó una fuerte polémica entre algunos de los miembros de dicho Comité, representantes de diferentes organismos de la Administración.Algunos de los miembros del Comité Organizador del Mundial-82, en su último pleno, celebrado hace varios días, pretendieron fijar ese desfase presupuestario en 1.200 millones de pesetas, que se cubriría con los beneficios correspondientes del tercer sorteo extraordinario de lotería destinado a la organización del Campeonato. Es muy posible que con esa cifra el Mundial-82 registrase beneficios, como su presidente, Raimundo Saporta, asegura casi siempre.

Aumento del costo de los materiales

Pero la cifra de los beneficios del tercer sorteo extraordinario de lotería que se destinarán al Comité Organizador han sido fijados en 638 millones de pesetas. Con la reducción de esos beneficios se pretende ahorrar determinados gastos, posiblemente de partidas en las que se rebajará su presupuesto señalado para ser destinado a otras, como puede ser la de la ceremonia inaugural.

En el Comité Organizador del Mundial-82 se estima que Víctor Sagi, el empresario al que se le adjudicó la realización de la ceremonia inaugural del campeonato, en 77 millones de pesetas, ha sido el principal artífice del desfase presupuestario de los actos. De todos modos, se acepta dicho desfase presupuestario por la introducción de mejoras en la ceremonia. Algunos de los miembros del Comité Organizador del Mundial-82 consideran que Víctor Sagi no se ha propasado en su labor, sino que los materiales necesarios para los actos que se ejecutarán han registrado considerables subidas en su coste, entre otras cosas, y que, además, se han sucedido imprevistos que no se esperaban.

"Se mirará con lupa el coste de los actos de la jornada inaugural del Mundial-82 para que no haya una peseta desviada", manifestó uno de los integrantes del grupo de personas que se reúne semanalmente con Rodolfo Martín Villa en el Palacio de la Moncloa. Pero el desfase económico originado en la ceremonia inaugural del Mundial-82 ha obligado a revisar su presupuesto, que se cubrirá con parte de los beneficios del tercer sorteo extraordinario de lotería, medida que tendrá que ser aprobado por el Comité Organizador, para lo que necesita celebrar un pleno más, a pesar de que se decidió no llevar a cabo ninguno. Bastará, de todos modos, que se decida en alguna de las reuniones semanales que se celebran en el Palacio de la Moncloa para que se dé por aprobada, con lo que, una vez más, se demuestra que, por encima del Comité Organizador se sitúan las decisiones adoptadas por el grupo de personas que preside Martín Villa, vicepresidente primero del Gobierno.