El Reino Unido lleva la guerra de las Malvinas a doce millas de las costas argentinas

El Gobierno británico intensificó ayer su presión militar sobre Argentina decretando que todo navío o avión militar de Buenos Aires que se aleje más de doce millas de sus propias costas será considera do como "hostil" y "tratado en consecuencia" por la fuerza de intervención aeronaval del Reino Unido. La nueva medida de Londres tiene por objeto impedir más ataques aéreos por parte argentina contra las fuerzas británicas desplegadas en el Atlántico sur.Esta decisión, que amplía el campo de actividad de la flota expedicionaria hasta el límite de las aguas territoriales argentinas- en el largo li...

El Gobierno británico intensificó ayer su presión militar sobre Argentina decretando que todo navío o avión militar de Buenos Aires que se aleje más de doce millas de sus propias costas será considera do como "hostil" y "tratado en consecuencia" por la fuerza de intervención aeronaval del Reino Unido. La nueva medida de Londres tiene por objeto impedir más ataques aéreos por parte argentina contra las fuerzas británicas desplegadas en el Atlántico sur.Esta decisión, que amplía el campo de actividad de la flota expedicionaria hasta el límite de las aguas territoriales argentinas- en el largo litoral que va desde el paralelo 36 al norte, frente a la desembocadura del Río de la Plata, hasta el paralelo 56 al sur, frente a la punta de Tierra de Fuego- entró en vigor anoche y fue anunciada mientras el Gobierno británico acordaba, según informaciones no confirmadas oficialmente, el envío al Atlántico austral de más destructores y fragatas.

Argentina presentó anoche ante la OEA una nota de protesta por la "irresponsable" decisión británica, en la que afirma que "se reserva el uso de las medidas apropiadas para ejercer su derecho de legítima defensa". Nicaragua tratará de aprovechar hoy en Costa Rica la presencia de líderes latinoamericanos para proponer la expulsión de EE UU de la Organización de Estados Americanos.

La proposición argentina de examinar nuevamente todas las relaciones entre América Latina y EE UU dio ayer al conflicto una nueva dimensión internacionalEl Gobierno británico había decretado anteriormente una zona de exclusión total de doscientas millas en torno a las islas Malvinas, que se aplicaba contra todo tipo de aviones y barcos, cualquiera que fuese su nacionalidad.El presidente de Estados Unidos declaró ayer que estaba "preocupado" por la decisión del Reino Unido de imponer una nueva zona de exclusión marítima a lo,largo de las costas argentinas.

La agencia soviética Tass, por su parte, condenó anoche el endurecimiento de la posición británica.

El secretario de Estado español para las Relaciones con las Comunidades Europeas, Raimundo Bassols, afirmó en Bruselas que el conflicto no influirá en nada sobre las negociaciones para la adhesión española al Mercado Común.

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