El proceso por la rebelión militar del 23 de febrero

El Gobierno catalán ofreció un homenaje de despedida al general Arozarena

El nuevo capitán general de Madrid, teniente general Ricardo Arozarena, expresó su pesar por marcharse de Barcelona y dijo del pueblo catalán que "es noble, sano y honrado", y que "el tremendo amor de los catalanes a su tierra les lleva a amar a España", durante el homenaje de despedida como titular de la Capitanía de Cataluña que le ofreció el Gobierno catalán. Añadió: "Yo, que tengo mi amor puesto en España, no puedo amarla si no amo a Cataluña".Asistieron unas doscientas personalidades catalanas a la cena-homenaje, entre las que se encontraban las primeras autoridades. El presidente de la G...

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El nuevo capitán general de Madrid, teniente general Ricardo Arozarena, expresó su pesar por marcharse de Barcelona y dijo del pueblo catalán que "es noble, sano y honrado", y que "el tremendo amor de los catalanes a su tierra les lleva a amar a España", durante el homenaje de despedida como titular de la Capitanía de Cataluña que le ofreció el Gobierno catalán. Añadió: "Yo, que tengo mi amor puesto en España, no puedo amarla si no amo a Cataluña".Asistieron unas doscientas personalidades catalanas a la cena-homenaje, entre las que se encontraban las primeras autoridades. El presidente de la Generalidad, Jordi Pujol, inició el intercambio de discursos, lamentando la marcha del militar que, sin embargo, calificó de decisión acertada "dado el prestigio y categoría personal y profesional del general Arozarena". Pujol pidió al nuevo capitán general de la Primera Región Militar que se hiciera portavoz de Cataluña en Madrid.

Arozarena, por su parte, contestó poniendo de manifiesto su cariño por la tierra catalana y su pueblo, el espíritu cordial que había presidido su relación con la Generalidad y la promesa expresada de hacer de portavoz en Madrid "de este pedazo de tierra de España".

Dijo que sus cuatro metas, al llegar a Cataluña, habían sido mantenerse dentro de la esfera de competencia militar, integrarse en Cataluña, colaborar con las autoridades autonómicas y del Estado, y ser sincero y honesto en su gestión. Afirmó que se iba satisfecho, y destacó de su paso por Cataluña la celebración del Día de las Fuerzas Armadas y la organización de actividades culturales para que los soldados conocieran la región.

Pujol entregó a Arozarena, como regalo de despedida, una estatuilla de un mozo de escuadra de la Generalidad, el cuerpo armado que custodia el palacio del Gobierno autónomo catalán.

Por otra parte, el teniente general Sáenz de Santamaría tomará posesión el martes próximo de la Capitanía General Catalana.

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