El ANE

( ... ) La otra noticia del pasado día 23 de febrero fue, sin duda, el encierro en el Ministerio de Trabajo de los representantes sindicales en la Comisión de Seguimiento del Acuerdo Nacional sobre Empleo. Encierro que no concluyó hasta que les fue asegurada una reunión con el vicepresidente económico y con el ministro de Trabajo, que ha de celebrarse hoy.El encierro de los representantes sindicales venía a culminar una larga historia de acusaciones mutuas entre todas las partes interesadas en el asunto y que desde hace tiempo parecen no lograr ponerse de acuerdo en nada.

Sería fácil ir...

( ... ) La otra noticia del pasado día 23 de febrero fue, sin duda, el encierro en el Ministerio de Trabajo de los representantes sindicales en la Comisión de Seguimiento del Acuerdo Nacional sobre Empleo. Encierro que no concluyó hasta que les fue asegurada una reunión con el vicepresidente económico y con el ministro de Trabajo, que ha de celebrarse hoy.El encierro de los representantes sindicales venía a culminar una larga historia de acusaciones mutuas entre todas las partes interesadas en el asunto y que desde hace tiempo parecen no lograr ponerse de acuerdo en nada.

Sería fácil ironizar con el retruécano, pero la materia creemos que es lo bastante grave como piara prohibir todo tipo de ironías. El ANE ha sido calificado, y lo es (¿o lo era?), como un instrumento imprescindible para hacer frente a la crisis que el país atraviesa.

Que el ANE puede, por el contrario, llegar a convertirse en una mera declaración de buenas intenciones que no llegaron a cuajar es, por desgracia, algo que está muy dentro de lo posible. Y no en vano se ha podido decir que en la reunión prevista para hoy se decidiría su futuro, pero hay que apostillar que no es, claro que no, el porvenir de un simple papel lo que está en juego, sino toda una estrategia acordada, todo un plan para hacer frente a los principales problemas laborales que tiene planteados el país.

¿Se puede jugar con eso?

25 de febrero