Hacienda recaudará con el IVA tanto o mas que con el impuesto sobre la renta

El impuesto sobre el valor añadido (IVA), llamado a conseguir una recaudación similar o superior al de¡ de la renta (cerca de un billón de pesetas), será implantado en España dentro de varios años, mediante un programa que acaba de elaborar y va a poner ya en marcha el Ministerio de Hacienda, con los ojos puestos en 1984. El coste de los preparativos, entre los que destaca el casi triplicar la plantilla de subinspectores y preparar al público y los empresarios, se estima en unos 11.000 millones de pesetas.

El IVA español, cuyo proyecto de ley será debatido durante los próximos me...

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El impuesto sobre el valor añadido (IVA), llamado a conseguir una recaudación similar o superior al de¡ de la renta (cerca de un billón de pesetas), será implantado en España dentro de varios años, mediante un programa que acaba de elaborar y va a poner ya en marcha el Ministerio de Hacienda, con los ojos puestos en 1984. El coste de los preparativos, entre los que destaca el casi triplicar la plantilla de subinspectores y preparar al público y los empresarios, se estima en unos 11.000 millones de pesetas.

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El IVA español, cuyo proyecto de ley será debatido durante los próximos meses en las Cortes, gravará en cada fase de producción el valor que se añada, con tipos iniciales del 4% para artículos o servicios sociales, 22% para los de lujo y 11% para los restantes. Además de sustituir a los actuales impuestos en cascada (tráfico de empresas, la mayor parte de los del lujo y parte del de la renta de monopolios y otros), se extenderá a productos o servicios que ahora no tributan, como el suministro de agua, los transportes urbanos e interurbanos y productos alimenticios.De la memoria publicada por Hacienda hace dos meses junto al proyecto de ley (EL PAIS, 29 y 30 de octubre de 1981) se desprende que la recaudación del IVA en 1981, según diversos sistemas de estimación, habría rondado el billón de pesetas, superior en varios cientos de miles de millones a la del impuesto sobre la renta, la primera fuente de ingresos del Estado. En dichos cálculos fueron tenidas en cuenta posibles minoraciones por ocultación de base o fraude, que son más fáciles con los actuales impuestos, pero no las derivadas de las normas para el período transitorio, todavía por definir.

La novedad del impuesto y su importancia está suscitando la publicación de numerosos libros; os, como la citada memoria de Hacienda, para instruir a los empresarios; otros, para influir en los parlamentarios que habrán de debatir el proyecto de ley. En el último caso se sitúan dos volúmenes que acaba de editar el Instituto de Estudios Económicos.

Censo de contribuyentes

Ahora, con el programa de implantación del impuesto que acaba de elaborar Hacienda, a través de una comisión que aglutina representaciones de los centros asociados, se desarrollará en los dos próximos años acciones para preparar a la Administración y a los contribuyentes.

Uno de los aspectos más ambiciosos del programa es el de inspección, en el que se ha concebido la posibilidad de llegar a instar la declaración a los contribuyentes rezagados, antes de que termine el plazo. Para ello, se pretende crear un censo o fichero, a partir de los datos facilitados para los impuestos sobre sociedades, renta, tráfico de empresas, lujo y licencia fiscal de empresarios y profesionales.

A dicho fichero serán incorporados los datos resultantes de las investigaciones efectuadas en el primer semestre de 1983 sobre contribuyente s que estén sujetos a los anteriores tributos y no hayan presentado declaraciones. Todos los datos obtenidos por esta doble vía serán entregados al Centro de Proceso de Datos antes de julio de 1983. Una vez procesados serán remitidos a las agencias tributarías para que los depuren selectivamente en el último trimestre de 1983. Así, en 1984, antes de que haya terminado el plazo para presentar la declaración, los contribuyentes podrán ser requeridos a que subsanen la omisión.

Areas del plan en marcha

Pero ya hay partes del plan prácticamente en marcha. Dentro del área de divulgación, donde Hacienda espera gastar unos 550 millones de pesetas, están siendo organizadas una serie de conferencias, seminarios y jornadas, que empezarán en los próximos meses. En una segunda fase, a realizar durante el próximo año, se intensificarán tales acciones y habrá una campaña de "amplísima difusión", a través de los medios de comunicación, folletos y diversas publicaciones.

También están a punto de ser iniciados programas Je documentación interna, estudios y publicaciones, y relaciones exteriores. En estas tres arcas no se prevén gastos adicionales, como tampoco en las de contabilidad, que incluye, por ejemplo, la elaboración de una normativa contable adecuada al IVA y la puesta a punto de la contabilidad empresarial.

Igualmente, Hacienda proyecta utilizar sus medios actuales para cubrir el área normativa, donde contempla, entre otras acciones, la redacción del proyecto de reglamento del IVA (el primer borrador puede estar disponible el próximo día 31, y el segundo un mes después de haber sido aprobada la ley en las Cortes), la confección de modelos de declaración y tramitación, y la respuesta al millar de consultas vinculantes esperadas para 1982, y la publicación de un libro-manual. El único gasto programado a este respecto, 21,5 millones de pesetas, es la creación de una Subdirección General del IVA.

Donde se esperan grandes gastos, hasta el punto de cubrir casi todos los 11.000 millones citados, es en las áreas de organización, gestión e inspección. Sólo en material hay programados 5.550 millones de pesetas, con el fin de atender las necesidades derivadas del aumento de contribuyentes (minoristas, profesionales, etcétera), que serán censados. A este efecto se espera crear 150 agencias provinciales y locales especializadas en el IVA (en total, Hacienda dispondrá de 400 en 1984) y contratar 1.500 funcionarios, la mayor parte la gestión y liquidación. En las delegaciones pueden crearse secciones IVA. El acondicionamiento de las nuevas agencias se llevaría 4.500 millones, y el arrendamiento, 1.050 millones más.

La ampliación de las plantillas de inspección será mayor. La plantilla de subinspectores es ahora de 2.000, aunque su cobertura sólo llega a 1.224. La estimación de necesidades para 1985 es de 5.000.

Por ello, durante 1982 pueden ser convocadas 2.276 plazas, y en los dos anos siguientes, otras 1.500.

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