El incidente del submarino soviético.

Dos funcionarios de la Embajada soviética fueron incapaces de convencer ayer al capitán de un submarino ruso, encallado desde hace cinco días cerca de una base naval sueca, de que accediese a desembarcar y prestar declaración ante las autoridades de Estocolmo. El capitán Pjotr Guzjin insistió en que sólo recibirá órdenes de sus jefes superiores y de forma directa. En la foto, el segundo secretario Boris Grigoriev (centro) y el agregado naval Kurij Prosvirnin (derecha) abandonan la base naval de KarIskrona donde se les permitió entrar para conferenciar desde allí con el capitán del barco....

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Dos funcionarios de la Embajada soviética fueron incapaces de convencer ayer al capitán de un submarino ruso, encallado desde hace cinco días cerca de una base naval sueca, de que accediese a desembarcar y prestar declaración ante las autoridades de Estocolmo. El capitán Pjotr Guzjin insistió en que sólo recibirá órdenes de sus jefes superiores y de forma directa. En la foto, el segundo secretario Boris Grigoriev (centro) y el agregado naval Kurij Prosvirnin (derecha) abandonan la base naval de KarIskrona donde se les permitió entrar para conferenciar desde allí con el capitán del barco.Página 2

Archivado En