La enorme caída de la población activa en Andalucía reduce el crecimiento del índice de paro

De cada diez parados en España, dos son andaluces. Las tasas de paro de esta región, cualquiera que sea el ámbito que se considere, son notablemente superiores al promedio nacional. Las características específicas de estas provincias, muy diferenciadas de las del resto del Estado, han hecho que se superpongan los problemas coyunturales de la crisis a los estructurales, hasta configurar la situación más dramática y preocupante del actual desempleo español, según un estudio sobre Estructura y composición del desempleo: especial referencia al caso andaluz, que hoy será presentado a la Prensa y a ...

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De cada diez parados en España, dos son andaluces. Las tasas de paro de esta región, cualquiera que sea el ámbito que se considere, son notablemente superiores al promedio nacional. Las características específicas de estas provincias, muy diferenciadas de las del resto del Estado, han hecho que se superpongan los problemas coyunturales de la crisis a los estructurales, hasta configurar la situación más dramática y preocupante del actual desempleo español, según un estudio sobre Estructura y composición del desempleo: especial referencia al caso andaluz, que hoy será presentado a la Prensa y a la opinión pública en Granada.

Este estudio, que es el primero en su género en cuanto a un análisis comparativo de las estructuras de empleo entre Andalucía y el resto del Estado, ha sido realizado por los profesores Marchante, Mojón y Pajuelo, de la Facultad de Ciencias Económicas de Málaga, y por el profesor Ignacio Santillana, de la Universidad Autónoma de Madrid, experto en temas de empleo. El estudio, que se centra sobre el período 1973-1980, ha sido promovido por la Caja de Ahorros y Monte de Piedad de Granada.El estudio pone de manifiesto -en sus conclusiones- que "en términos globales las variables más significativas relacionadas con el empleo, es decir, la población ocupada y el desempleo, evidencian que la situación del mercado de trabajo en Andalucía es más grave que la del conjunto nacional". La menor participación de la población andaluza en la actividad económica, los menores niveles de ocupación y, consecuentemente, las mayores tasas de desempleo son los tres factores definitorios del mercado de trabajo en Andalucía. La evolución de la población activa y de la población ocupada muestra un agravamiento de esta situación a lo largo del septenio analizado que coincide con el comienzo y desarrollo de la crisis. Respecto a las tasas de paro, si bien son siempre superiores en Andalucía a las observadas en España, su crecimiento en el período considerado ha sido menor, con la excepción de los "trabajadores agrarios", debido a los elevado niveles de partida.

En el análisis por sexos del mercado de trabajo, el estudio pone de manifiesto que la poblacíón activa femenina se reduce en Andalucía con mayor intensidad que la masculina, hecho que contrasta con lo acaecido a nivel nacional. La discriminación de la mujer trabajadora en Andalucía aún queda más patente al comprobar que, incluso partiendo de tasas de actividad notablemente inferiores a las de los varones y a la media nacional, la población activa femenina ha caído a un mayor ritmo que la masculina. El problema está aún más acentuado en Andalucía occidental.

Por lo que se refiere a edades, el estudio constata que la fuerza de trabajo en Andalucía es relativamente más joven que en España. Esta característica se extiende tanto al análisis de la población activa como al desempleo. Debe señalarse, sin embargo, que la población activa andaluza presenta un envejecimiento más acusado que la española. Por otra parte, el grueso del desempleo en Andalucía está compuesto por estratos jóvenes de población, y muy especialmente por los menores de veinte años. La mayor virulencia del desempleo en Andalucía, añade el estudio, corresponde a las mujeres dentro de los menores de veinte años, cuyas tasas de desempleo son superiores tanto a las que se refieren a los varones como a las que atañen a las mujeres en España.

Excesivo peso de la agricultura

A nivel sectorial la población activa andaluza presenta los mayores contrastes con respecto a España en el excesivo peso del sector agrícola y la escasa significación del sector industrial. La importancia relativa de la construcción en Andalucía es análoga a la de España, mientras que el porcentaje de participación de los servicios es algo superior en Andalucía, aunque desde una perspectiva dinámica estas diferencias tienden a reducirse.Del análisis de las tasas de paro se concluye que en todos los sectores éstas son superiores a las de España. No obstante, su crecimiento durante el período analizado es menor que el de todo el Estado, salvo en el caso de la agricultura de la subregión occidental. Lo preocupante en Andalucía -afirma el estudio- no son sólo los altos niveles de paro en construcción y servicios (especialmente hostelería), sino la nula capacidad de absorción de los otros sectores productivos, debido a la escasa importancia de la industria y a las características peculiares de la agricultura. Una agricultura cuya especialización productiva, sobre todo en las grandes explotaciones andaluzas, se ha dirigido en la línea de sustituir empleo por capital, reduciendo los cultivos intensivos en mano de obra. Por ocupaciones, "comerciantes y vendedores", "trabajadores de los servicios" y "agricultores, ganaderos y pescadores", son las de mayor importancia relativa en Andalucía.

El estudio, que propone tres grandes líneas de acción o políticas económicas para actuar sobre el mercado de trabajo y el desempleo, tanto a nivel nacional como en Andalucía, hace hincapié en la necesidad de una política de ámbito regional para estas provincias que tienda a diversificar la producción, a desarrollar servicios sociales y a movilizar los agentes regionales relevantes para el mercado de trabajo.

El estudio, en concreto, propone entre otras medidas para Andalucía: acciones sobre la agricultura, (precios, regadíos y aplicación de la legislación sobre fincas manifiestamente mejorables) y sobre la industria (potenciación de la agroalimentaria y de las empresas de tamaño medio).

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