La cláusula de despido frena la reconversión del sector naval

Las cláusulas de despido, jornada y salario mantienen enfrentadas las posturas de sindicatos y patronal y detenidas las negociaciones para la reconversión de los grandes astilleros, cuyas conversaciones se reanudarán el próximo miércoles.En la última ronda negociadora la parte empresarial se ratificó en su intención de mantener la posibilidad del despido o bien suprimirla si las centrales sindicales aceptan el resto de las cláusulas en los términos redactados en su oferta inicial. A esta pretensión los sindicatos respondieron con una negativa rotunda. Las dos partes están de acuerdo, no obstan...

Las cláusulas de despido, jornada y salario mantienen enfrentadas las posturas de sindicatos y patronal y detenidas las negociaciones para la reconversión de los grandes astilleros, cuyas conversaciones se reanudarán el próximo miércoles.En la última ronda negociadora la parte empresarial se ratificó en su intención de mantener la posibilidad del despido o bien suprimirla si las centrales sindicales aceptan el resto de las cláusulas en los términos redactados en su oferta inicial. A esta pretensión los sindicatos respondieron con una negativa rotunda. Las dos partes están de acuerdo, no obstante, en las bajas por incapacidad, bajas voluntarias y bajas vegetativas.

En el capítulo de jornada laboral la patronal, representada por Astano y AESA, se ratificó en las 1.930 horas laborables en 1981, 1.900 en 1982 y 1.880 para 1983, frente a la contraoferta sindical de 1.900 horas para el presente año, 1.880 para 1982 y 1.830 para 1983.

Respecto a los salarlos, la patronal mantuvo su oferta de incremento salarial del 6% durante el presente ejercicio y del 7% para 1982. Las centrales participantes en la reunión, CC OO, UGT y ELA-STV, rechazaron la propuesta e insistieron en su contraoferta de aceptar crecimientos por debajo del índice de precios al consumo en algunos puntos si el resto del paquete negociador es favorable para los trabajadores.

Las centrales sindicales, según comunicó un portavoz de CC OO a este diario, pretenden tener ultimado el acuerdo de reestructuración del sector antes del próximo día 15 de junio. En ninguno de los casos esperan que lleguen las vacaciones con puntos pendientes de negociación.

Las tres centrales sindicales miembros de la mesa negociadora se reunirán durante la mañana de hoy para tomar posiciones y prever futuras posturas ante la lentitud del proceso negociador y las ofertas realizadas por la patronal. Medios sindicales no descartan una convocatoria de movilizaciones en el sector de astilleros de todo el país si la negociación se estanca, como parecen indicar los datos de que se dispone.

Para el próximo martes, por otra parte, está prevista una reunión de los sindicatos con sus homólogos en los pequeños y medianos astilleros. con objeto de conocer cuáles son las circunstancias por las que atraviesan y prever las posibilidades de negociación que se les presentan.

La comisión negociadora del subsector de pequeños y medianos astilleros está en la actualidad acelerando sus trabajos para ponerse al mismo nivel que los grandes, ya que se trata de llegar a unos acuerdos únicos de reconversión del sector.

Las conversaciones por separado de ambos subsectores tienen en común los objetivos globales a alcanzar previa reconversión, y que se cifran en los siguientes puntos: productividad mínima de 33 a 34 horas por tonelada de registro bruto compensado; previsión de que los costes de personal no superen al final del período de reconversión -año 1983- el 25% del valor de la obra ejecutada a precio de venta; especialización de la producción para alcanzar una adecuada independencia tecnológica; reducción del 34% de la capacidad actual de producción del conjunto del sector, fijando para los grandes astilleros del sector público un máximo de 430.000 toneladas de registro bruto compensado, y para los medianos y pequeños, 300.000 toneladas de registro bruto.

Con los objetivos citados cubiertos, y según acordó la Comisión Delegada para Asuntos Económicos, el Instituto Nacional de Industria dedicará el 60% de la producción, como mínimo, a la exportación.