Comerciantes vizcaínos reclaman mayor protección contra los delincuentes
Mientras que en el conjunto de España la delincuencia común ha disminuido ligeramente en los últimos meses, en el País Vasco, y en particular en la zona minera y margen izquierda del Nervión, los pequeños robos en comercios, agresiones físicas particulares, violaciones, etcétera, no han dejado de incrementarse. Hasta el punto de que los comerciantes de Baracaldo (120.000 habitantes) acaban de amenazar con dejar de pagar los impuestos y tasas municipales si antes del fin de verano los ayuntamientos de la zona no toman medidas eficaces contra la ola de atracos que vienen sufriendo.
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Mientras que en el conjunto de España la delincuencia común ha disminuido ligeramente en los últimos meses, en el País Vasco, y en particular en la zona minera y margen izquierda del Nervión, los pequeños robos en comercios, agresiones físicas particulares, violaciones, etcétera, no han dejado de incrementarse. Hasta el punto de que los comerciantes de Baracaldo (120.000 habitantes) acaban de amenazar con dejar de pagar los impuestos y tasas municipales si antes del fin de verano los ayuntamientos de la zona no toman medidas eficaces contra la ola de atracos que vienen sufriendo.
La necesidad de dedicar gran parte de los efectivos policiales a la lucha contra el terrorismo, y las especiales medidas de seguridad que por el mismo motivo se ven obligadas a observar las patrullas policiales, serían, según la explicación ofrecida ayer por el gobernador civil a la comisión de alcaldes que acudieron a plantearle el tema, algunas de las causas determinantes de esta situación.
Según expusieron los alcaldes, las policías municipales carecen en general de la capacidad de disuasión suficiente como para que su acción resulte eficaz si no cuentan con la posibilidad de una intervención prácticamente inmediata de las patrullas de la Policía Nacional.