La guerra civil se reanuda en Líbano

La guerra civil parece reanudarse en Líbano, esto es al menos lo que se piensa en Jerusalén, merced a los informes de observadores israelíes, que señalan «la espesa humareda que envuelve el puerto de Beirut y la intensificación de los tiroteos», informa desde Tel Aviv Víctor Cygielman.A lo largo del pasado jueves se contabilizaron 69 muertos y 336 heridos, según las diversas fuentes consultadas. Los combates se intensificaron en los diversos barrios de Beirut y sus alrededores, controlados por cristianos y musulmanes.

Las fuerzas musulmanas y palestinas se enfrentan a las cristia...

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La guerra civil parece reanudarse en Líbano, esto es al menos lo que se piensa en Jerusalén, merced a los informes de observadores israelíes, que señalan «la espesa humareda que envuelve el puerto de Beirut y la intensificación de los tiroteos», informa desde Tel Aviv Víctor Cygielman.A lo largo del pasado jueves se contabilizaron 69 muertos y 336 heridos, según las diversas fuentes consultadas. Los combates se intensificaron en los diversos barrios de Beirut y sus alrededores, controlados por cristianos y musulmanes.

Las fuerzas musulmanas y palestinas se enfrentan a las cristianas en la capital libanesa, mientras la ciudad de Zaile, en poder cristiano, es bombardeada continuamente por las tropas sirias.

En Jerusalén se comenta que los tiroteos en Beirut y Zajle, donde el Gobierno libanés es incapaz de controlar la situación, demuestran lo ridículas y absurdas que son las pretensiones de este mismo Gobierno de enviar soldados al sur de Líbano para «restablecer la calma y mantener el orden».

Mientras tanto, el comandante Haddad, jefe de las milicias derechistas cristianas, anunció públicamente que se opondrá con todas sus fuerzas al envío de tropas libanesas «a la zona libre de Líbano, controlada por mis soldados». Asimismo, Haddad advirtió al general irlandés Callaghan, jefe de las tropas de pacificación de la ONU, que «no se mezcle en un asunto que concierne exclusivamente a los libaneses, de lo contrario», dijo Haddad, «sufrirá las consecuencias de su política de intervención flagrante».

El jefe de las milicias cristianas afirmó que esta posición la han asumido enteramente el presidente libanés, Elías Sarkis, y el jefe del Estado Mayor, Víctor Kuri, ambos cristianos.

Por su parte, la coalición de partidos políticos cristianos libaneses presentó varias demandas, como el alto el fuego en los combates, envío del Ejército libanés a Zajie, cercado por los sirios, y que este Ejército patrulle la línea de demarcación de la capital.

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