Ex ministro francés pide aplazar 10 años el ingreso de España en la CEE

El ex ministro francés de Agricultura Eduardo Pisan¡ sugirió ayer que España y la Comunidad Económica Europea (CEE) deberían planificar paralelamente durante diez años sus economías antes de que se produzca la integración plena de nuestro país en el Mercado Común.Pisani participó en una mesa redonda sobre la ampliación de la CEE y la reforma de la política agrícola, común, organizada por la Fundación Friedrich Ebert (socialdemócrata) con motivo de la estancia en Bruselas de un grupo de dirigentes sindicales de la Unión General de Trabajadores (UGT) y de ELA-STV. Junto a Pisani, participaron en...

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El ex ministro francés de Agricultura Eduardo Pisan¡ sugirió ayer que España y la Comunidad Económica Europea (CEE) deberían planificar paralelamente durante diez años sus economías antes de que se produzca la integración plena de nuestro país en el Mercado Común.Pisani participó en una mesa redonda sobre la ampliación de la CEE y la reforma de la política agrícola, común, organizada por la Fundación Friedrich Ebert (socialdemócrata) con motivo de la estancia en Bruselas de un grupo de dirigentes sindicales de la Unión General de Trabajadores (UGT) y de ELA-STV. Junto a Pisani, participaron en la mesa redonda Alois Pfeiffer, ponente del primer informe comunitario sobre la adhesión de España; Gerard Rozet, de la Dirección General de Agricultura de la Comisión Europea; José Barreiro, representante del Ministerio de Agricultura en Ia misión española ante la CEE, y Umberto Lamagni, secretario de la Federación Europea de Trabajadores Agrícolas. Actuó de moderador el periodista español Eduardo Tell.

La posición de Pisani, para quien la integración de España en las actuales circunstancias de la CEE es «una locura», no fue compartida por el resto de los oradores. Pfeiffer consideró que la ampliación tendría efectos positivos no sólo políticos, sino también económicos, en la Comunidad y se mostró partidario del establecimiento de acuerdos con España, a fin de que vaya adaptando su economía. Rozet expresó los temores de la comisión ante un aumento de los excedentes agrícolas, pero añadió que se trataba de «problemas no insuperables». José Barreiro negó que se pudiera aislar la problemática agrícola del contexto político y económico de la adhesión y advirtió contra el cansancio que se puede registrar en España ante un excesivo énfasis en los problemas técnicos de la ampliación. Lamagni se mostró partidario de un período transitorio de cinco años, como término medio, y acusó a la CEE de defender los intereses de compañías como la Unilever.

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