Los golpistas contaron con cómplices

Dos días después del intento de golpe de Estado en Madrid, toda la opinión francesa se muestran real mente inquieta respecto al futuro español. Altos mandos militares galos coinciden al estimar que «los golpistas han gozado de complicidades».La victoria del Rey es consagrada por todos los comentarios y editoriales, que ofrecían a los franceses toda clase de detalles sobre el «dramático y lamentable espectáculo conducido por una soldadesca criminal». Pero, cara al futuro inmediato, entre el problema vasco y los demonios franquistas, ¿cuál es el margen de maniobra del Rey? S...

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Dos días después del intento de golpe de Estado en Madrid, toda la opinión francesa se muestran real mente inquieta respecto al futuro español. Altos mandos militares galos coinciden al estimar que «los golpistas han gozado de complicidades».La victoria del Rey es consagrada por todos los comentarios y editoriales, que ofrecían a los franceses toda clase de detalles sobre el «dramático y lamentable espectáculo conducido por una soldadesca criminal». Pero, cara al futuro inmediato, entre el problema vasco y los demonios franquistas, ¿cuál es el margen de maniobra del Rey? Se interrogan unánimemente todos los especialistas.

Varios militares, como el general Bigeard, ex secretario de Estado del Ministerio de Defensa, el general Dumont y el capitán y escritor Pierre Sargent, creen que «Tejero no pudo operar sólo por su cuenta», y que en Francia no es posible imaginar algo semejante al atentado de Madrid contra las instituciones. Los medios militares, como los comentaristas, evocaban ayer repetidamente el golpe de Argel en 1961, cuando el general y presidente de la República, Charles de Gaulle, actuó rápida y enérgicamente, operando una depuración en regia. Pero el paralelo se acaba, recuerdan los observadores, al considerar «los poderes especiales de De Gaulle, en tanto que presidente, que le faltan al Rey de España y que tampoco parecen asumir ni el Gobierno ni la clase política».

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