Toman posesión los nuevos vicerrectores de la Complutense

Ayer tomaron posesión de sus cargos los nuevos vicerrectores y decanos de la Universidad Complutense, cuyos nombramientos, a propuesta del rector Francisco Bustelo, fueron confirmados por el Ministerio de Universidades e Investigación. Tres de ellos, que no son catedráticos, han sido designados vicerrectores en funciones, fórmula adoptada también para el caso de uno de los dos nuevos decanos.El profesor Horacio Oliva, que accede al decanato de la facultad de Derecho, tras haber sido elegido democráticamente, ironizó sobre la fórmula adoptada por el Ministerio para su nombramiento. En su...

Ayer tomaron posesión de sus cargos los nuevos vicerrectores y decanos de la Universidad Complutense, cuyos nombramientos, a propuesta del rector Francisco Bustelo, fueron confirmados por el Ministerio de Universidades e Investigación. Tres de ellos, que no son catedráticos, han sido designados vicerrectores en funciones, fórmula adoptada también para el caso de uno de los dos nuevos decanos.El profesor Horacio Oliva, que accede al decanato de la facultad de Derecho, tras haber sido elegido democráticamente, ironizó sobre la fórmula adoptada por el Ministerio para su nombramiento. En su opinión, el hecho debería ser interpretado como una especie de memento, «algo así», señaló, «como si se nos estuviera diciendo constantemente: «Recordad que sois débiles».

Además del ya citado profesor Oliva, tomaron posesión el decano de la facultad de Veterinaria, profesor Guíllermo Suárez, y los vicerrectores Jaime Terceiro, Salvador Rivas, José Alcina, Antonio Bonet, Roberto Mesa, José Simón y Juan Trías. Los tres últimos son los profesores a quienes el Ministerio considera oficialmente en funciones.

El nombramiento de José Luis Abellán se ha pospuesto para el próximo mes de junio, debido a que no hay suficientes dotaciones presupuestarias para el total de vicerrectorados previstos y dado que va a permanecer fuera de España en los dos próximos meses.

El rector Francisco Bustelo dijo que sólo iba a haber una clase de vicerrectores; calificó de gremialistas ciertas amenazas de impugnación, basadas en la presunta ilegalidad del nombramiento de los vicerrectores que no son catedráticos; aludió a las soluciones científicas que la universidad puede aportar a la sociedad, en lugar de actuar como un «frente directo de lucha» en el terreno político.