Cuestión de confianza
El debate de estos días sobre la cuestión de confianza es la segunda arte de la moción de censura. El residente se atrevió a hacer una remodelación gubernamental antes del debate de la primavera y ahora lo está pagando.Los métodos democráticos nos dicen, quiera o no UCD, que tras el debate parlamentario hay que hacer una profunda reflexión sobre el tema y tomar las oportunas medidas. Sin embargo, no lo entiende así Suárez, que prefiere adoptar medidas y someterlas después a la consideración de la Cámara.
Este Gobierno es el duradero, según el mismo Gabinete, aguantará hasta las próx...
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El debate de estos días sobre la cuestión de confianza es la segunda arte de la moción de censura. El residente se atrevió a hacer una remodelación gubernamental antes del debate de la primavera y ahora lo está pagando.Los métodos democráticos nos dicen, quiera o no UCD, que tras el debate parlamentario hay que hacer una profunda reflexión sobre el tema y tomar las oportunas medidas. Sin embargo, no lo entiende así Suárez, que prefiere adoptar medidas y someterlas después a la consideración de la Cámara.
Este Gobierno es el duradero, según el mismo Gabinete, aguantará hasta las próximas elecciones. ¿Por qué, entonces, fue quitado en su momento? Porque, como ha mantenido EL PAIS, este es un Gobierno de «nuevos viejos ministros». /